Terraferida denunció ayer, en una rueda de prensa, que el crecimiento de plazas turísticas en el conjunto de Balears ha sido de un 37,3 % durante esta legislatura. El representante del grupo ecologista, Jaume Adrover, detalló que las islas han registrado desde marzo de 2015 hasta el mismo mes de 2019 el aumento más grande de plazas turísticas de toda la historia del turismo del archipiélago, con 158.000 plazas más que hace cuatro años.
Adrover explicó que la oferta de plazas turísticas seguirá aumentando porque aún se siguen tramitando expedientes que todavía no han sido contabilizados y porque las bolsas turísticas permiten seguir elevando el techo de plazas en todas las islas.
La isla que más crecimiento ha sufrido en estos cuatro años, según los datos de la Conselleria, es Formentera, puesto que se ha pasado de un total de 7.828 plazas turísticas en 2015 a 20.585 en 2019, lo que representa un crecimiento del 163 %. Sin embargo, Adrover señaló que los datos de Turismo han estado desactualizados durante años y que por ese motivo el porcentaje de crecimiento es tan elevado, aunque añadió que «en Formentera hay un boom turístico espectacular». Por su parte, la isla de Mallorca ha experimentado un crecimiento de 109.001 plazas durante esta legislatura, lo que supone un crecimiento del 37,7 %.
El portavoz también se refirió a la sanción impuesta por el Govern a la compañía de alquiler vacacional Airbnb y aseguró que no ha servido «para nada». «El alquiler turístico ilegal continúa, Airbnb gana en cinco minutos 100.000 euros, la sanción del Govern es ridícula», sentenció, y añadió que «la prohibición del alquiler vacacional es la «fake new más grande de la historia de la comunidad».
En Menorca, el aumento de plazas turísticas ha sido del 46,1 %, es decir, de 22.914 plazas. El alquiler turístico representa el 34 % del total de las plazas de la isla. Por último, la isla de Ibiza tiene una oferta de 91.380 plazas legales y el aumento durante los últimos cuatro años ha sido de 13.497 plazas, un 17 % más respecto al año 2015.
Terraferida criticó que la nueva ley turística ha fracasado por no establecer un «techo real de plazas». Por ello, proponen medidas como congelar el número de plazas turísticas en todas las islas, reformar la ley turística y fijar un techo real, eliminar las plazas ilegales reforzando el cuerpo de inspectores y establecer una moratoria de construcción en el suelo rústico.