La formación Unidas Podemos presentó ayer su candidatura al Ayuntamiento de Eivissa, liderada por Aitor Morrás. Según explicaron, se han presentado propuestas «para hacer una ciudad más amable en la que vecinos y vecinas disfruten del derecho a la ciudad».
Morrás puso sobre la mesa las políticas de movilidad en las «que tiene que prevalecer el derecho de los peatones sobre el de los vehículos mediante la creación de aparcamientos subterráneos para residentes en el municipio y eliminación de barreras arquitectónicas que hagan una ciudad más amable».
El candidato de la formación morada a la alcaldía anunció la creación de 1.600 plazas de aparcamientos subterráneos para residentes «a un precio asequible», que estarían situados en las pistas de tenis de L'Eixample, junto al Parque de la Paz, en el solar de la antigua Delegación del Gobierno y «si es posible, en el proyecto del parque Reina Sofía». A la vez, planteó la construcción de una red de carriles bicis que conecten con todos los barrios, la mejora de los aparcamientos disuasorios y la creación de una empresa municipal de transporte de gestión pública con minibuses que conecten los barrios con el centro de la ciudad y «que sería gratuita para jóvenes, mayores y residentes más necesitados». En cuanto a movilidad, Unidas Podemos también propone la creación de zonas «para que los vecinos puedan aparcar en su barrio». La número dos de la lista al Ayuntamiento de Ibiza, Claudia Cotaina, se refirió a medidas para la protección de la mujer. En concreto, proponen la creación de un dispositivo denominado «botón del pánico» que conecte a través de una aplicación del móvil con la Policía Local.
Otra de las medidas sería el establecimiento del sistema de paradas bajo demanda en los buses nocturnos para que «las mujeres se sientan seguras y puedan pedir que, dentro de la ruta, se puedan bajar en cualquier punto, más cercano a su destino, aunque no cuente con parada». Cotaina puso énfasis en que «Ibiza sea cada vez una ciudad más feminista». En vivienda, se han referido a los barrios de la Marina y Dalt Vila, asegurando que «se necesita que los residentes vuelvan a vivir en estos barrios, que residan en las casas durante todo el año para recuperar la vida en el centro de Ibiza y, por ende, el comercio». Con este objetivo, afirmaron que se harán inspecciones más exhaustivas en lo referente al alquiler turístico ilegal.