El director de orquesta colombiano, afincado desde hace años en Mallorca, Felipe Aguirre ofrece hoy a las 19.30 horas en Can Ventosa la conferencia La voz divina de la lira, incluida en el ciclo del Curs de Pensament i Cultura Clàssica que organiza la sección balear de la Sociedad Española de Estudios Clásicos (SEEC).
En esta ocasión, este músico que desde 2014 es director artístico del Festival Formentor Sunset Classics y que ha colaborado con maestros como Zubin Mehta, Daniel Barenboim, Kiri Te Kanawa, Lang Lang o Thomas Hampson, propondrá a los asistentes un viaje a la Grecia clásica –desde el 900 a.C al 300 a.C.– a través de cuatro instrumentos de cuerda: El phorminx, el barbitos, la lira o la cítara.
Los instrumentos
Según explicó el propio Aguirre a Periódico de Ibiza y Formentera, el más antiguo es el phorminx. Datado durante la primera mitad del primer milenio antes de Cristo, era un instrumento de entre dos y seis cuerdas que se tocaba con los dedos y que ya es mencionado por Homero como el que tocaban los aedos o cantantes de la época para contar las epopeyas o poemas.
Después, el experto hablará a los asistentes del barbitos. También conocido como barbitón. Según algunos escritos, su apogeo tuvo lugar en el siglo VI a.C., siendo utilizado por destacados letristas de la edad de oro de la Grecia clásica como Alkaios, Sappho y Anakreon para acompañar sus canciones. También era habitual en obras de teatro y, según la mitología, era el instrumento que tocaban los sátiros. Aunque no se conoce mucho sobre su construcción, se sabe que era de sonido más grave y que tenía siete cuerdas y brazos de yugo largos que se encuentran uno encima del otro.
El tercero es uno de los grandes clásicos, la lira. Aguirre explica que tuvo una gran popularidad en torno al siglo IV y III a.C., entre otras cosas, «porque era muy barato de elaborar al emplearse para su caja el caparazón de una tortuga y una simple piel seca distendida para taparla». Era muy importante en la vida cotidiana de la Grecia clásica, en las viviendas y también en las escuelas, donde los estudiantes aprendían a tocarla para poder interpretar poemas de Homero o de Sapho. Como curiosidad, en esta época las tres cuerdas recibían los nombres de las tres musas de Delfos; de la grave a la aguda: Nete, Mese e Hípate.
El último de los instrumentos de los que hablará Aguirre es la cítara. En la antigua Grecia su uso estaba asociado al culto a Apolo, en contraposición al aulós, asociado al culto a Dionisos, y por ello estaba considerada un instrumento más noble. Se sostenía sobre las rodillas, en una mesa y se puntean sus cuerdas, aunque algunas también podían ser pisadas como en la guitarra y otras tenían una altura fija, empleándose como acompañamiento.
Constructor
Además, Felipe Aguirre mostrará estos instrumentos construidos por él siguiendo las instrucciones o documentos que se conservan de aquella época, desde el 800 y 900 a.C. y 300. a.C. «Cuando termine la conferencia, los visitantes podrán acercarse, verlos en primera persona y hacerse fotos con ellos, algo que creo que puede ser muy interesante porque son instrumentos que, salvo la lira, no son muy conocidos por el gran público».
Incluso, el director de orquesta colombiano hará sonar los instrumentos interpretando música de la época de la Edad de Oro de la Grecia clásica. Son piezas musicales improvisadas, pero también de alto valor histórico ya que se han recuperado de algunos de los artistas o escritores más importantes de la época.