Ibiza y Formentera recibieron en los primeros diez meses del año un total de 3.083.668 turistas, lo que representa una caída del 1,24 %, según los datos de la encuesta de flujos turísticos (Frontur) que elabora el Gobierno y que ayer hizo públicos el Ibestat.
En términos absolutos, este dato representa que, de enero a octubre, las Pitiusas han perdido 28.600 viajeros. En estos diez meses, sólo en abril y en octubre se han registrado más visitantes respecto a 2018 con incrementos del 8,6 % y del 5,66 %, respectivamente.
El resto de meses hubo una caída sostenida en el tiempo, si bien el peor resultado mensual respecto a 2018 se registró en enero de este año con un descenso del 17,8 %, según los datos del Ibestat difundidos ayer.
En cuanto al tipo de alojamiento, algo más de dos millones de viajeros se alojaron en hoteles en los diez primeros meses del año, mientras que 445.287 optaron por alojamiento de alquiler.
La encuesta de Frontur incluye un epígrafe de ‘alojamiento de no mercado', que separa la vivienda en propiedad (escogida por 133.123 viajeros) y otro alojamiento de no mercado–incluye casas rurales, camping y «otros alojamientos de no mercado»–, opción escogida por 390.840 turistas.
Gasto turístico
En paralelo a la caída en la llegada de turistas se produce un descenso en el gasto de los mismos. Así, la encuesta sobre el gasto turístico Egatur pone de manifiesto que, en los diez primeros meses del año, los viajeros han dejado en las Pitiusas 3.055 millones de euros, lo que representa un descenso del 1,2 % respecto al mismo periodo del año pasado.
En cifras absolutas, significa que los viajeros gastaron 46 millones menos que en 2018. Los visitantes que escogieron Ibiza y Formentera para pasar sus vacaciones pasaron una media de 6,6 días cuando hace dos años este dato era de 7,2 días.
Cabe destacar, además, que cada turista ha gastado 990 euros en sus vacaciones, que son 20 euros menos que la media balear, lo que da un resultado de 165,72 euros de gasto diario.