La consellera balear de Agricultura, Mae de la Concha, confirmó ayer en el Parlament que la recogida de redes abandonadas en los lechos marinos pertenecientes al territorio balear arrancará entre la primavera y el verano de 2020, y durará hasta 2021. Fue en respuesta a una pregunta parlamentaria de la diputada popular, Virginia Marí, que quiso saber el número de redes retiradas con el fondo creado para tal cometido, a raíz de la tasa turística, que asciende a 550.000 euros.
Marí reprochó a la titular de Pesca que hasta ahora «no se haya destinado un solo euro a la retirada de redes», actuación que, según la diputada, sí ha desarrollado y pagado el Consell d'Eivissa, en contraposición a la inacción de la Conselleria. «Le ruego que se mire bien el proyecto y se ponga en marcha porque los fondos marinos están llenos de redes fantasma y la mayoría está bastante localizadas gracias al sector pesquero que informa de su localización. Eso sí, que lo hagan buzos especializado, para que no baje cualquiera a 25 metros de profundidad, pero creo que estará hecho antes el ferrocarril que la retirada de las redes», afirmó la representante del PP.
De la Concha reprochó que, coincidiendo con la Cumbre del clima de Madrid, no hubieran más preguntas sobre esta temática y confirmó que en 2018 se aprobó un impuesto de turismo sostenible para retirar redes de la zona de Balears. «Los fondos llegaron esta primavera. Hubo elecciones y se hará en tres años a partir de la primavera-verano de 2020, 2021, 2022 y no le quepa duda que se retirarán», contestó la representante del Govern.
Además, detalló que, durante esas tres temporadas, la inversión de esos 550.000 euros no solo se destinarán a la retirada de redes, que será en 15 o 20 puntos, sino en cartografiar el fondo marino y los fondos de coral que existen.