Tras medio año fuera de la muñeca de su propietario, el valioso y exclusivo Richard Mille 50-03 McLaren F1 robado en la ‘milla de oro' de Ibiza ha sido recuperado.
El reloj valorado en 1.200.000 euros fue sustraído la tarde del 19 de junio a Rashad Abdullayeb, un joven de 25 años de Azerbaiyán. La víctima, hijo de un magnate del petróleo, caminaba por el Passeig Joan Carles I cuando fue abordado por otro joven que le arrebató la preciada pieza, el cronógrafo manual más ligero del mundo (con un peso de 40 gramos), un modelo del que solo se fabricaron 75 unidades en el mundo.
Los hechos fueron denunciados en la comisaría de la Policía Nacional de Ibiza, cuerpo que abrió una investigación para dar con el paradero del reloj más valioso sustraído en Ibiza. Paralelamente, el propietario del Richard Mille 50-03 McLaren F1 contrató a una empresa privada de seguridad, que también ha seguido el rastro de la valiosa pieza durante estos meses.
Según confirmó Alejandro Bonet Templeton, representante legal del dueño del preciado reloj, ha sido una empresa de seguridad privada la que ha recuperado el cronógrafo, según le trasladó su dueño. El abogado indicó que el cronógrafo fue localizado a mediados de diciembre en un punto del mundo sin determinar.
Bonet Templeton advirtió que Abdullayeb llevaba la pieza que le había prestado Seymur Mehdiyev, dueño del reloj que subrayó su «satisfacción» y que se siente «muy agradecido» con las tareas de investigación para conocer el paradero del reloj, así como «con el trato dispensado por parte de la Policía Nacional de Ibiza».
El robo más sonado
El robo de este reloj tuvo una gran repercusión internacional dado su elevado precio. Seis meses después el afectado ha informado de la recuperación de la pieza, pero apenas se han ofrecido detalles, más allá de que fue localizado a principios de diciembre.
Durante este tiempo la Policía Nacional y la Guardia Civil de Ibiza han recuperado decenas de relojes de alta gama sustraídos durante la temporada de verano en la isla.
El Passeig Joan Carles I de Ibiza y Platja d'en Bossa son los puntos más calientes donde actúan estos «cazadores de relojes». También se han registrado robos en Sant Antoni.
Las fuerzas y cuerpos de seguridad han desarticulado varias cédulas de las denominadas ‘bandas del Rolex', grupos cada vez más especializados y que suelen actuar por encargo. Los delincuentes, italianos en su mayoría, aterrizan en Ibiza para cometer el golpe o varios golpes y luego regresan con las piezas robadas.