La venta de mascarillas arrasa en la mayoría de las farmacias consultadas en la isla de Ibiza y hay problemas de desabastecimiento. Pese a que todos coinciden en que la primera medida preventiva para evitar el contagio es el lavado de manos, la venta de mascarillas está subiendo como la espuma está última semana. «Hemos vendido muchas mascarillas», dice Amanda Tur, farmacéutica de la farmacia Tur Viñas.
En su establecimiento, ubicado en la calle de las farmacias, se han vendido más de un centenar. «Entiendo que la gente esté un poco alarmada, pero no pasa nada, muere mucha más gente por la gripe», recuerda. El coste de una mascarilla tipo quirúrgica cuesta alrededor de un 1,5 euros.
Reservadas
En otras farmacias, como la de Mónica Marí en Ibiza, que recurre a las redes sociales, tiene la página en facebook La botica de Mónica, para ofrecer información acerca del coronavirus y consejos útiles como que el lavado de manos es la mejor manera de quitarse los gérmenes, ha vendido alrededor de 150 mascarillas sólo esta última semana.
Otros establecimientos tienen reservas, pero se han encontrado con clientas que compran mascarillas para su familia. «Una señora la compró para su hija que vive en Madrid y no encontraba mascarillas en ninguna farmacia».
En algunos establecimientos consultados aseguran que quienes compran las mascarillas han sido «sobre todo los asiáticos que viven aquí, pero no la gente de Ibiza», apunta Tanit Monfort, de la farmacia de Nuria Ferrer, en el barrio de Figueretes de Ibiza. De momento, tienen este producto, pero si llegan a agotar las reservas no pueden pedir más. «Ahora mismo están racionadas y no es posible encargar más», añade.
La demanda no sólo se produce en Vila, sino también en otras localidades como el caso de Sant Jordi. La farmacia Antonia Rodríguez Ribas estaba desabastecida el jueves por la mañana y por la tarde llegaron de un laboratorio de Palma. «Hay un desabastecimiento y tenemos bastantes encargadas», aseguran.
En la farmacia Antich Torres de Santa Eulària no disponen de ellas. «Se agotaron a principios de semana y no han vuelto a reponer. A principios de semana había algunas, pero están a cuentagotas y no han vuelto a venir», remarca Josep Torres, farmacéutico adjunto. Como está pasando en otros locales, «las pide mucha gente asiática para enviarlas a China».
Más demanda
Las mascarillas no son un producto que habitualmente compran los clientes, pero tras el coronavirus se está generando más demanda. «Están pidiendo más, normalmente no hay costumbre de comprar a no ser que haya una persona en tu familia con una enfermedad contagiosa y tampoco hay problemas de polución ambiental, pero ahora no es fácil encontrarlas», apunta Margarita Villangómez Marí, que tiene una farmacia en Sant Antoni. De momento, en su establecimiento tienen disponibles, «pero ya veremos lo que duran».
En boticas que se encuentran en otros puntos de la isla, como en Sant Joan, de momento no hay mucha demanda y en una consultada del núcleo urbano reconocía que «hay más demanda», pero no están desabastecidas. «Vamos a recibir más. Igual si no tiene un distribuidor, le pedimos a otro», apostilla.