El presidente de la Asociación de Comerciantes del Mercat Nou, Agustín Pineda, reiteró ayer que el actual edificio «ha cubierto una etapa», ya que, desde el año 1978, cuando fue construido, «la realidad ha cambiado».
En una entrevista en el programa BNP, de la Televisión d'Eivissa y Formentera (TEF) y que fue emitido anoche, Pineda recordó que, durante las elecciones autonómicas y locales de 2011, ya advirtió de que hacía falta «actualizar» la infraestructura, por lo que contactó con la empresa Mercasa, que ha diseñado reformas en varios mercados de España, tales como Zaragoza y Santiago.
El representante de los comerciantes aceptó que existe «una inquietud razonable y una gran incertidumbre» entre los paradistas del Mercat Nou.
Pineda dijo que se necesitarán dos plantas y 250 puestos en el nuevo edificio e incluir supermercados dentro de la plaza, ya que hoy en día las compras ya no se hacen a diario, como antes, por lo que se necesita complementar la oferta.
A vueltas con el PGOU
Pineda aseguró que están pendientes de la tramitación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para ver dónde se ubicará finalmente el mercado provisional, que ya no será en una carpa, sino en un edificio que luego se podrá usar como polideportivo, por ejemplo. En este sentido, opinó que el mercado provisional «no debería de interferir mucho en el PGOU». Como el edificio del mercado actual ya está hecho, a su parecer no influiría en provocar demoras y, además, «daría vida al centro».
Preguntado sobre si sería posible adecuar el actual edificio, Pineda volvió a manifestar que no lo ve viable. Para el representante de los comerciantes del Mercat Nou, sería algo así como «invertir el dinero sin mucha idea». «El mercado necesita dinamización», aseguró Pineda, quien abogó también por ampliar los horarios.
Por último, Pineda pidió a los políticos «brevedad y buena mano», ya que, aseguró, el nuevo mercado «generará mucha actividad en la zona».