El Ministerio Fiscal solicita una pena de cuatro años de prisión para el responsable de una villa construida en ses Salines en 1996, una edificación irregular por la que se le imputan sendos delitos contra el medio ambiente y contra el ordenamiento del territorio.
El juzgado de lo Penal número 2 de Ibiza tenía programado para el día de ayer la celebración de la vista oral, pero el juicio fue aplazado por la falta de algunos testigos, señalaron fuentes judiciales.
El representante fiscal solicita una pena de dos años de prisión por un delito contra la ordenación del territorio y otros tantos por un delito contra el medioambiente.
En 2014, el juzgado de lo contencioso administrativo número 2 de Palma ya reclamó al Consell que explicase las actuaciones llevadas a cabo para cumplir una sentencia que diez años atrás ya ordenó el derribo de la mansión alzada en un «suelo inedificable» del Puig des Corb Marí, un Área Natural de Alto Nivel de Protección, según la Ley de Espacios Naturales (LEN).
Según la denuncia, la propiedad construida infringía varias normativas e incluso había afectado a una superficie de montaña protegida.
Larga batalla judicial
La edificación de la empresa Skaren SA ya lleva más de una veintena de años en los tribunales tras la denuncia presentada en su día por el Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN).
La vivienda fue denunciada por las irregularidades en su construcción. Años después también fue denunciada por ser utilizada como vivienda turística.