Poder dar el alta a un paciente con COVID-19 es una victoria, pero si además ese paciente se encuentra entre los perfiles de mayor riesgo supone una alegría mayor.
Este fin de semana recibió el alta la segunda paciente de Ca Na Majora, la unidad para atender a pacientes de avanzada edad con síntomas leves de COVID-19. Una mujer de 88 años que ingresó en Can Misses el pasado 24 de marzo en la Unidad de Medicina Interna y que pasó a la Unidad de Media Estancia de Ca Na Majora en cuanto se abrió.
De nuevo los sanitarios despidieron a la paciente entre aplausos, según informó el Área de Salud de Ibiza y Formentera, como ya hicieran con Margarita, una paciente de la misma edad que recibió el alta la semana pasada.
Por otra parte en la jornada de ayer se dio cuenta de dos nuevos casos positivos que ingresaron en la Policlínica Nuestra Señora del Rosario.
El número de casos activos subió a 71 y el total de casos desde el inicio de la pandemia es de 152.
Hay 41 personas hospitalizadas de las que 11 están en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Cabe señalar que las UCI de Ibiza llevan doce días sin recibir nuevos ingresos por lo que su ocupación sigue siendo baja.
Otras 25 personas están recibiendo atención domiciliaria.
Entre los profesionales de la sanidad se redujo el número de casos activos de 3 a 2 y se cumplen once días sin contagios entre los sanitarios.
En cuanto a los profesionales en vigilancia pasaron de ser 19 a 23.