«Yo soy optimista por naturaleza, pero te tienes que poner en la peor de las circunstancias. Si luego va mejor, pues bien. Esperamos poder abrir para final de junio y julio, pero hay que prepararse para no poder abrir». Abel Matutes Prats, presidente de Palladium Hotel Group, habló de las previsiones de la temporada en una entrevista a través de instagram con Andrés Rodríguez, presidente y editor de Forbes España.
Matutes no esquivó preguntas y fue claro a la hora de valorar la situación que se vive actualmente con la crisis del COVID-19: «Para agosto no pinta mal, pero hay muchas reservas cancelables y no sabemos. No sabemos si se va a permitir el mercado nacional o europeo. Si se permite Europa se salvará la temporada. Hay que ver las condiciones para viajar. Dependemos de muchas cosas para saber qué va a pasar» y afirmó que no tienen «todas las respuestas que nos gustaría por parte de las autoridades». «Otros países europeos han sido más claros», apuntó.
Además, reconoció que existe «una iniciativa» para extender la temporada prácticamente hasta final de año, pero aseguró que «todo depende de cuándo se pueda abrir». «Si no se abre demasiado tarde, habrá suficientes meses altos para intentar alargar la temporada. Se está intentando hacer una temporada alta en otoño, pero si se tarda mucho en abrir, para muchas empresas no merecerá la pena», explicó Matutes Prats.
Turismo nacional
En esa misma línea, se mostró escéptico a la hora de pensar en que se pueda mantener una temporada únicamente con el turismo nacional: «Es casi imposible. El español es un turismo muy importante y de calidad, pero no deja de ser un 20 %. Este turismo permitiría abrir algunos hoteles, pero se sufriría mucho». Eso sí aseguró que esto es en el caso de los hoteles. Matutes prácticamente descartó los grandes eventos: «La parte de fiesta, discoteca y grandes eventos es más complicada. Ojalá me equivoque, pero creo que no será posible».
El presidente de Palladium Hotel Group también habló sobre la posición del grupo en el Caribe: «Está igual que Europa, tenemos todos los hoteles cerrados. El clima ayuda allí, pero los mercados emisores están muy afectados». Aseguró que piensa que será más fácil abrir «casi seguro», pero que hay «más incertidumbre» al depender tanto de los países emisores.
A lo largo de la entrevista también se trataron otros temas. Al ser cuestionado por su decisión de poner un hotel al servicio de la sanidad madrileña, Matutes detalló: «Estaba viendo las noticias y salió el ministro de Sanidad diciendo que se esperaba una oleada de enfermos y que se iban a necesitar camas. Esa misma tarde lo pensé. Llamé a algunos contactos en el gobierno madrileño y puse a su disposición nuestros hoteles. Les recomendé el que está en frente del Marañón y me dijeron que muchas gracias».
Al recordarle que este era su primer año como presidente, tuvo tiempo para bromear - «No sé si seré el gafe yo»-, antes de volver a ponerse serio: «Me pagan para que en los momentos en los que hay un ciclo de crisis hacerlo mejor que los demás. El problema es que no es que se haya torcido el ciclo, sino que no hay ciclo. Ahora estoy sin poder reaccionar pese a todos los esfuerzos de estrategia de estos años». Aún así intentó ver un lado positivo a esta situación desde un punto de vista de la gestión: «Tenemos que seguir planificando qué queremos ser, hacia dónde queremos llevar la compañía e intentar corregir los fallos que tenemos. Antes iba todo muy rápido y no había tiempo para pensar. Ahora, esperemos que no sea mucho, pero tenemos ese tiempo».
Gestión del Gobierno
Matutes también se mojó a la hora de valorar las medidas que están llevando a cabo desde las instituciones. «El Gobierno se ha enfrentado a una cosa totalmente nueva y eso hay que reconocérselo. Creo que se pueden hacer las cosas mejor y peor. Hay que ser más prudente cuando ya se hablaba desde hace tiempo. Pecaron de optimistas o poco prudentes», señaló. Además, habló bien del Govern: «Hay algunas administraciones que lo están haciendo mejor que otras. Baleares ha entendido muy bien el problema y está intentado ayudar todo lo que puede».
En este aspecto habló de la importancia de que el Gobierno incentive el turismo una vez que se vaya regresando a la normalidad, o al menos que siente unas bases para que se pueda reactivar: «El sector va a sufrir mucho y eso puede generar una cascada a otros sectores. No voy a pedir demasiados favores al Gobierno, pero sí deberían sentar las bases para que nosotros podamos hacer las cosas sin demasiadas trabas. En Baleares se está trabajando en esto». «Me gustaría que el turismo español se centrara en descubrir nuestro país y así ayudar», concluyó.
Ojalá que no se equivoque, Ibiza y sus residentes se lo agradecerán.