La juez del juzgado de Instrucción número 2 de Ibiza, en funciones de guardia, decretó ayer a mediodía un auto de libertad provisional para un joven de 21 años detenido como presunto autor de un delito de homicidio imprudente por la muerte de un hombre, expareja de su madre, al que habría propinado una paliza.
Según informaron ayer desde el Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears, la juez ordenó la puesta en libertad con cargos del joven, al que se le retiró el pasaporte como medida cautelar. Fuentes judiciales indicaron que el imputado no tiene antecedentes penales y se le investiga por un delito de lesiones graves con resultado de muerte.
El joven, de nacionalidad española y vecino de Sant Josep, fue detenido el miércoles por la Guardia Civil como presunto autor de un delito de homicidio por la muerte de un hombre, de 41 años y nacionalidad rumana, al que presuntamente agredió 24 horas antes en Sant Jordi.
Según informaron desde la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Guardia Civil, víctima y agresor habrían mantenido una disputa. Posteriormente, la víctima se personó en el hospital de Can Misses para ser atendido por los facultativos. El hombre presentaba numerosas y graves lesiones por los golpes recibidos e ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Las mismas fuentes indicaron que las lesiones resultaron irreversibles. Fue intervenido quirúrgicamente, pero horas después falleció.
Fuentes de la investigación indicaron que el hombre había manifestado en el hospital que las lesiones se las había causado el hijo de su expareja.
La Guardia Civil abrió una investigación que desembocó en la detención del joven como presunto autor de un delito de homicidio.
Víctima y agresor eran vecinos de Sant Josep. Durante el confinamiento decretado por el estado de alarma, la víctima había regresado a la casa de su expareja en Sant Jordi, punto donde presuntamente se desencadenó la agresión que resultó mortal.
La Policía Judicial mantiene abierta la investigación.