La Policía Local de Sant Antoni ha interpuesto cuatro denuncias por infracciones a las ordenanzas municipales en las diferentes actuaciones realizadas este fin de semana contra la venta ambulante en Cala Salada y Cala Saladeta, según informó ayer el Ayuntamiento de Sant Antoni. En el primer operativo, los agentes interceptaron una importante cantidad de productos destinados a la venta ambulante, por la cual se formuló una denuncia por infracción a las ordenanzas municipales. En total se intervinieron tres neveras de playa, cuatro bolsas de compra, 15 kilos de hielo, 17 latas de cerveza, 50 botellines de agua y dos cajas de cocos.
En otro operativo realizado durante el fin de semana, los agentes identificaron a tres vendedores e interpusieron tres denuncias tras localizar en una zona boscosa diverso material destinado a la venta ambulante que se encontraba camuflado en telas de ocultación y a altas temperaturas, sin cumplir con las medidas sanitarias correspondientes.
En total, incautaron más de 250 latas de refrescos, agua y cerveza, cajas de cocos, diez bolsas de hielo, así como 58 vestidos.
Estas denuncias se suman a la interpuesta a finales de junio a un vendedor en Cala Saladeta por venta ambulante.
Sant Antoni recordó que hacen controles diarios en las playas del municipio para controlar el aforo máximo y garantizar que se respetan las medidas de seguridad sanitarias.