Los padres y sus respectivos hijos están con muchas ganas y nervios ante la vuelta a las clases en un momento tan delicado como este, en el que el coronavirus ha provocado que el colegio o el instituto que se encuentren sea muy diferente al que dejaron hace unos meses.
Elisa Marí Miguel
«Está muy ilusionada porque tiene muchas ganas de ver a sus amigos después de tantos meses, pero nosotros también estamos un poco nerviosos y angustiados porque creo que habrá contagios en los centros», explicó ayer a Periódico de Ibiza y Formentera Rebeca Miguel, madre de Elisa, una estudiante de 11 años que este año cursará sexto de Primaria en la Escola Can Bonet de Ses Païsses.
Ella vuelve el viernes durante dos horas en las que le explicarán los protocolos que a partir de ahora regirán su día a día en clase. Según Rebeca, ya ha habido reuniones con padres donde se les ha explicado, por ejemplo, que los niños solo pueden usar el baño durante dos horas cada grupo, que las entradas se harán en grupos cada cinco minutos o que se ha parcelado el patio para que haya el menor contacto posible entre los alumnos. Tampoco se podrá dejar material en las aulas y tendrán un mismo profesor para todas las materias, salvo específicas como Inglés.
Lo que más preocupa a Elisa y a su madre es que en su colegio, para bajar las ratios, han creado un grupo mixto con alumnos de 5º y 6º de Primaria donde quedarán algunos de sus amigos. «Hemos pedido que esta división se haga según la afinidad de los alumnos y no tanto en función del nivel educativo porque puede ser muy duro para los niños estar tanto tiempo separados de los que han sido sus amigos durante este tiempo», concluyó Rebeca.
Gael Rodríguez Datpkus
Mientras, el pequeño Gael Rodríguez Datpkus ya lleva un par de días acudiendo «contentísimo y con muchas ganas por volver a ver sus amigos» al Morna International College.
A sus cuatro años estudia el equivalente a 2º de Infantil y, según explicó su madre Gintare a Periódico de Ibiza y Formentera, durante estos días ha hecho un horario de 11.00 13.00 horas para adaptarse a las nuevas condiciones y a su nueva profesora. Después, mañana, comenzará con el horario completo, desde las 09.00 a las 15.00 horas.
Gael compartirá clase con 13 amigos más en un colegio que, entre otras cosas, «ha destinado la mayor parte de las actividades al exterior aprovechando que cuenta con un patio grande, luminoso y muy abierto». Además, el centro cuenta con todas las medidas de higiene y potencia la distancia entre alumnos aunque en el caso de Gael, al no tener seis años, aún no es obligatorio que lleve mascarilla. Una medida que, según Gintere, «es muy dura para los pequeños porque no es sano que estén siete horas casi sin poder respirar tras una mascarilla».
Ana Muñoz Gutiérrez
Ana, a sus 17 años, es una joven y aplicada estudiante que reside en Nuestra Señora de Jesús y que este año empezará 2º de Bachillerato en el Instituto Santa María de Ibiza. Aunque no lo ha decidido, por la ilusión que pone al contarlo y por lo que le gustan los niños, todo indica que se acabará dedicando a la educación.
Confiesa con una sonrisa que está nerviosa, «principalmente porque empiezo el último curso de Bachillerato y no sé cómo irá todo» y porque este viernes tiene que hacerse una prueba después de que hace unos días tuviera algo de fiebre.
De momento, no podrá empezar las clases con sus compañeros hoy y mañana pero ya afronta «con ganas, tranquilidad y responsabilidad» la vuelta. Sus clases serán semipresenciales, divididas en dos grupos de ocho alumnos, uno los lunes, miércoles y viernes, y el otro, la semana que viene, los martes y los jueves.