La Policía Local de Sant Antoni ha interpuesto un total de 52 denuncias en el marco de una campaña de control del uso del cinturón de seguridad y del sistema de retención infantil (SRI).
Según informaron ayer fuentes municipales, los agentes controlaron un total de 1.038 vehículos entre los días 5 y 11 de octubre, denunciando a 36 conductores por no llevar el cinturón puesto.
Las mismas fuentes concretaron que también se interpusieron tres denuncias por hacer uso de dispositivos móviles mientras conducían, tres por carecer de la ITV en regla y tres más por dar positivo en el test de alcoholemia.
Otras denuncias
Los agentes también sancionaron a cinco conductores más por otras causas: por carecer del seguro obligatorio, por realizar un adelantamiento prohibido, por conducir con el permiso caducado, por una alcoholemia penal y por conducir sin disponer de la autorización administrativa válida.
El objetivo de la campaña es concienciar sobre el peligro que conlleva no usar estos dispositivos de seguridad, ya que suponen una medida eficaz a la hora de prevenir o reducir las lesiones ocasionadas por los accidentes de tráfico. Los datos de la Dirección General de Tráfico indican que el cinturón de seguridad reduce un 50 por ciento el riesgo de fallecer y en torno al 75 por ciento las lesiones en caso de accidente. La Policía Local se ha adherido esta semana a la nueva campaña de control de camiones y autobuses de la DGT, que se realiza hasta el 18 de octubre.