El presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, ha lamentado este lunes que de nuevo vayan a aplicarse en la Isla «medidas duras» a partir del 7 de enero para frenar los contagios porque «la situación es muy grave». «Estas medidas se aplican para salvar vidas», ha insistido.
En rueda de prensa, Marí ha señalado que las nuevas restricciones suponen volver al punto de partida, aunque se trata de medidas sanitarias consideradas por los expertos como las más «adecuadas».
Por ello, ha apelado a la responsabilidad individual y colectiva de todos y ha pedido también «comprensión» porque «no es plato de buen gusto» aplicar estas restricciones. «Debe ser una lucha de todos», ha añadido.
El presidente ha lamentado que en diez días, en Ibiza se ha doblado la tasa de incidencia acumulada, 293 casos por cada 100.000 habitantes en estos momentos. Así, «todo el camino andado se ha perdido», ha manifestado.
Tras una reunión celebrada este lunes con patronales y agentes sociales, Marí ha explicado también que se ha abordado la necesidad de mejorar los controles en puertos y aeropuertos tras las quejas recibidas por cómo se están llevando a cabo las pruebas de coronavirus a los viajeros. El presidente ha reconocido en este sentido que falta personal y una mejor coordinación.
En el encuentro, se ha acordado convocar una reunión con Delegación del Gobierno y los alcaldes de la Isla para mejorar la coordinación de todas las policías locales y que la sociedad visualice una mayor presencia de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
Sobre el retraso en el inicio de la vacunación, Marí ha pedido que se aumente el número de vacunas previstas y se cumpla el calendario. Para ello, es necesario un «mayor esfuerzo» y que desde Sanidad se apliquen las medidas necesarias, ha insistido.
Entre otras cuestiones, también se ha acordado solicitar líneas de ayuda «ágiles» para los empresarios afectados por las restricciones y que por parte del Gobierno y del resto de administraciones se puedan aplicar medidas fiscales para paliar los efectos de esta situación. El presidente ha aclarado que la hostelería no es la causante «ni los responsables directos» del incremento de contagios.
TOQUE DE QUEDA A LAS 22.00 HORAS DESDE EL JUEVES
El Consell de Govern ha aprobado este lunes que la isla de Ibiza suba de nivel 2 a nivel 3 de alerta por Covid-19. Las medidas de nivel 3 se reforzarán también con el cierre de interiores de cafeterías, bares y restaurantes y de locales de juegos y apuestas, y con el adelanto del toque de queda a las 22.00 horas.
Estas medidas adicionales entran en vigor el 7 de enero y todas permanecen vigentes hasta el 26 de enero.
El empeoramiento de los indicadores epidemiológicos y la necesidad de reforzar las medidas dirigidas a evitar situaciones que puedan favorecer los contagios, han aconsejado avanzar una semana la revisión de los niveles de alerta.