La Audiencia Provincial empezó ayer a juzgar a un vecino de Ibiza que se enfrenta a una petición fiscal de cuatro años de prisión por un delito de tráfico de drogas, una acusación que el hombre rechazó ayer en la primera jornada de la vista oral.
El juicio arrancó ayer con la declaración del acusado, quien negó los hechos y rechazó cualquier acuerdo de conformidad. Además de la pena de prisión, el Ministerio Fiscal solicita una multa de 14.000 euros.
Según el relato de los hechos, la Guardia Civil interceptó al acusado un total de seis cilindros prensados que contenían cocaína, una decena de pajitas de colores naranja y amarillo que también escondían cocaína y una bolsita con cierre de alambre con más droga. Una vez pesado el material, la cocaína intervenida alcanzaba los 81 gramos. La droga fue entregada por una tercera persona que se encontraba en la casa.
Material para vender la droga
En el registro de la vivienda los agentes también intervinieron dos bolsas de plástico con autocierre que contenían un total de 240 gramos de marihuana.
Además de las drogas, al acusado se le intervino un total de 8.290 euros en billetes de 100, 50, 20, 10 y 5 euros, dinero que procedería de la venta de drogas. Durante la inspección también intervinieron una máquina de envasar al vacío.
Los agentes encontraron todo este material, así como una gran cantidad de munición durante el registro de la vivienda después de ser requeridos por la pareja del acusado por un caso de malos tratos en el ámbito familiar, según el relato de los hechos.
El tribunal De la sección segunda de la Audiencia Provincial señaló para el viernes la segunda y última sesión del juicio.