El cantautor ibicenco Joaquín Garli lanzó ayer por la mañana en formato físico su segundo disco de estudio titulado La Cabaña después de que viera la luz a través de las principales plataformas digitales el pasado 30 de septiembre. Incluye sus mismas doce canciones grabadas y masterizadas en la ciudad de Barcelona por Micky Forteza-Rey Segura junto al batería Marcos Orozco y la cantante Sonia Torres Arabí que se ha encargado de hacer los coros.
Garli se mostró ayer «ilusionado y emocionado» a Periódico de Ibiza y Formentera con la puesta en marcha en formato físico de este trabajo que se puede conseguir al precio de 10 euros a través de sus redes sociales. «Aunque haya gente que piense que hoy en día es una decisión de locos o valientes yo creo que sacar un disco como se hacía en los años noventa es una deuda que tienes con tus propias canciones, la de darles una casita que pueda hacer felices, tanto al cantante que las crea como al que las escucha».
De hecho, el cantante ibicenco aseguró «que en los tiempos tan duros que nos ha tocado vivir todavía hay muchos románticos enamorados de la música que quieren seguir teniendo ese disco para tener un contacto más íntimo con la música que escuchan aunque finalmente acaben formando parte de la decoración de su hogar».
Retraso por el coronavirus
La Cabaña en formato físico ha visto como retrasaba su salida al mercado debido al coronavirus. Joaquín Garli terminó de grabarlo a mediados del año 2020 pero la aparición de la pandemia lo cambió todo puesto que su intención era que pudiera estar disponible en los meses de otoño. «Después de muchas idas y venidas por fin ya está aquí con nosotros y no puedo estar más contento porque se trata de un disco que he escrito durante dos años, después de publicar en 2017 mi primer trabajo Sintecho, y porque en él creo que a través de los doce temas he reflejado mis inquietudes y mis observaciones sobre este mundo tan extraño en el que vivimos actualmente».
En este sentido, el cantante aseguró «que canciones como 13, La Cabaña , El jardín del olvido, Bonustrack o Manuela intentan ser una lupa de la sociedad» en la que transmite su opinión sobre temas tan diversos como la industria discográfica, el amor, la fuerza para vivir, la transexualidad o el odio «pero sin intentar convencer a nadie de que lo que yo digo es lo mejor».
De hecho, el título del disco, La Cabaña, tampoco está elegido al azar. «Refleja una historia personal de mi pareja que habla de las fuerzas que tiene el ser humano cuando ante una situación límite no tenemos más remedio que vernos obligados a poner todo de nuestra parte para poder levantarnos y salir adelante».
A pesar de todo, Garli aseguró que trata de un disco «que tiene como fin intentar hacer un poco más felices» a la gente que escuche las canciones y «demostrarles que la paz no puede ser un escondite sino un acompañamiento en nuestro día a día cotidiano». Y es que este firme defensor de «que debemos ser felices desde el primer momento en el que abrimos los ojos cada día», define su segundo trabajo como el resultado de una época de madurez a la que ha llegado «tras evolucionar como cantante y como persona en estos últimos años, dejando un poco de lado al Joaquín que salió en la tele para dar paso a alguien que tiene las suerte de poder escribir y componer temas e, incluso, interpretarlos para un disco propio».