Han pasado siete meses desde la última vez que las Pitiusas contabilizaron menos de 100 casos activos. Fue el 13 de agosto cuando el contador estaba en 84 y al día siguiente, con la segunda ola ya en marcha, ascendió a 122. Desde entonces nunca se volvió a bajar a estas cifras, ni si quiera en el valle entre la segunda y la tercera ola.
El Área de Salud de Ibiza y Formentera notificó ayer un nuevo caso positivo y cuatro altas, por lo que la cifra descendió hasta los 98 casos activos, dos de ellos en Formentera.
Ayer había 28 personas hospitalizadas, tres menos que el martes, de las que 22 se encuentran en la Unidad F con una persona de Formentera, y seis en la UCI del Hospital Can Misses.
Por otro lado, había 70 personas leves o asintomáticas en seguimiento domiciliario por parte de los equipos de Atención Primaria, 69 en Ibiza y uno en Formentera.
Por último, subieron hasta los ocho el número de profesionales en vigilancia activa, de los que tres son positivos.
La ocupación de las camas de críticos sigue siendo el peor indicador que tiene Ibiza, que ya se mueve en varios indicadores dentro de los guarismos considerados ‘nueva normalidad'. Ayer la incidencia acumulada a 14 días era de 22 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que la IA7 se situaba en ocho casos. El Ministerio considera la nueva normalidad por debajo de 25 y 10 casos, respectivamente. También es muy bueno el indicador de la tasa de positividad que se situaba en 0,68 %, por el 4% que marca el Ministerio para que un territorio abandone la nueva normalidad y pase a riesgo bajo.