Una comunidad de vecinos ha tenido que pagar una sanción de 4.200 euros al Consell d'Eivissa tras ser denunciada por obstruir el trabajo de los inspectores de Ordenación Turística de la máxima institución insular.
Los hechos ocurrieron en septiembre de 2019 cuando el presidente de los propietarios del edificio impidió a los inspectores poder realizar su tarea, momento en el que se propuso una sanción de 7.000 euros, según informó ayer el Consell d'Eivissa a través de un comunicado.
Tras la presentación de alegaciones y aplicada la reducción por pago adelantado y voluntario y reconocimiento de la responsabilidad, el Consell d'Eivissa finalmente ha ingresado la cantidad de 4.200 euros.
Se trata de la primera denuncia cobrada por la máxima institución insular por este motivo.
Cabe recordar que en el verano de 2019 se impulsó una campaña de inspección en todos aquellos edificios donde constaban denuncias que advertían de la presencia de pisos turísticos. Hasta el lugar, se desplazaban inspectores de Ordenación Turística del Consell. Policías Locales, Guardia Civil y Policía Nacional.
La directora insular contra el Intrusismo, Naihara Cardona, destacó ayer que, con esta sanción, se demuestra que «entorpecer» la labor de los inspectores «no sale gratis». «Hasta el momento, si una persona entorpecía la labor de los inspectores de Turismo quedaba impune y ahora demostramos que esto no sale gratis. Los inspectores pudieron hacer su trabajo, abrieron diligencias y, además, sancionaron al presidente de la comunidad por no dejar al Consell garantizar los derechos y deberes de todos», concluyó Cardona.