El confinamiento y las medidas restrictivas por la pandemia de la covid-19, en concreto de marzo a julio de 2020, motivó un aumento del consumo de producto local por su calidad del 20 %, un crecimiento que fue del 26% en Mallorca, un 26% en Ibiza y un 13% en el caso de Menorca.
Un 32,6 % de la población compró más en tiendas de proximidad y el 11,3% incrementó la compra de productos agroalimentarios a domicilio, según los datos de un estudio que ayer presentó la Conselleria de Agricultura del Govern balear.
En esos cinco meses, de marzo a julio del año pasado, el consumo alimentario cayó un 19,9% (108.837 toneladas menos), si bien la importancia del pequeño comercio y su función social adquirió relevancia en detrimento de las grandes superficies y centros comerciales.