La presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (FEHIF), Ana Gordillo, informó ayer de que en estos momentos ya está abierta el 40% de la planta hotelera, lo que representa algo más de 200 de los 539 establecimientos de las islas asociados a la patronal, que cuentan una capacidad para 77.000 plazas.
A la espera de que el Gobierno de Reino Unido modifique la calificación de los destinos turísticos, y con la confianza en que Baleares avance del semáforo ámbar actual al verde, la federación hotelera considera que este 40% de hoteles abiertos se mantendrá en lo que queda de junio y a principios de julio.
«En este momento carecemos de previsiones y tampoco sabemos con certeza si abrirán los hoteles que ahora están cerrados», expresó Gordillo, aunque mostró su esperanza en que a finales de este mes el Gobierno de Boris Johnson propicie este cambio de calificación. «Cuando estemos en semáforo vede, entonces veremos si hay nuevas aperturas», precisó, y recordó que el mercado británico supone el 30% de los visitantes de Ibiza, «y está claro que hoy por hoy dependemos de ellos, y eso se está notando».
Frente a la drástica desaparición de visitantes británicos por las restricciones impuestas en su país, los mercados emisores español, holandés, alemán e italiano están creciendo, circunstancia que en parte alivia la caja de los hoteleros pitiusos. «Ahora estamos trabajando muy bien con españoles, pero ya lo hacíamos en 2019, cuando se notó un aumento y había previsiones de crecimiento», indicó Gordillo, que se congratuló por el buen ritmo que están experimentando las reservas de españoles para julio y agosto, al igual que el mercado holandés, «que casi está a la par que el español y nunca habíamos vivido este auge de visitantes de Países Bajos».
No obstante, a pesar de que también italianos y franceses están contribuyendo a llenar el vacío que dejan los ingleses, «todo esto se queda un poco cojo si no contamos con nuestro principal mercado emisor de turistas, que son los británicos», explica la presidenta, una situación que, por contra, no se reproduce en Mallorca, donde los alemanes son el mercado mayoritario.
Gordillo recordó que en Ibiza y Formentera «hemos hecho un esfuerzo enorme entre todos, empresarios, trabajadores y ciudadanos, con unas restricciones que han sido las más duras de toda España y con el objetivo de tener una temporada medio buena», pero las decidiones de Reino Unido «nos están trastocando los planes, porque ya no sabemos si se trata de una decisión sanitaria o política».
En relación con la campaña de inmunización, la presidenta de los hoteleros pitiusos pidió que se mantenga la precaución a la vez que se agilice la vacunación, suprimiendo las franjas de edad una vez que se haya vacunado a todas las personas vulnerables: «Ahora necesitamos la vacunación de toda la población porque, aunque estemos hablando de normalidad, aún no debemos olvidar que convivimos con el covid y nos quedan unos meses de temporada por delante, por lo que si queremos estar activos, mantener una normalidad y tener una buena temporada es crucial que se agilice la vacunación a todo el mundo. Hay mucho en juego y no nos podemos olvidar de esto».