Formentera se convierte este jueves en la primera isla de las Baleares que culmina la vacunación contra la lengua azul tras el brote detectado en Mallorca el pasado mes de junio, cuando se detectaron 19 ejemplares ovinos y un bovino positivos por esta enfermedad.
Este mismo jueves, Loana Fraga, veterinaria de la Asociación de defensa sanitaria (ADS) de ovejas y cabras inyecta la última vacuna contra la lengua azul en Formentera. Mientras, en Ibiza, la vacunación continúa a buen ritmo desde el pasado 28 de julio.
Han sido 830 animales vacunados en las 68 explotaciones formenterenses de ovino en menos de un mes. Fraga explica que cada vial, de 100 ml, no se conserva más de 10 horas una vez abierto y alcanza para 50 animales. De esta manera, la veterinaria ha tenido que organizarse para poder aprovechar un vial en cada media jornada de trabajo que dedica a la vacunación.
Una vez vacunado, el ganado se considera inmunizado 21 días después de la inoculación completa de la vacuna. Para el ganado caprino no existe vacuna alguna, tema que, según cuenta la veterinaria de Formentera, preocupa a los pequeños ganaderos formenterenses.
La lengua azul es una enfermedad vírica que se trasmite a través de la picadura de un mosquito y que no afecta a las personas, no es una zoonosis. Además no representa ningún riesgo para los consumidores, ni siquiera en cuanto a la carne y a la leche de animales infectados.