El servicio de Urgencias del hospital Can Misses ha atendido en los nueve primeros meses del año un total de 32.869 urgencias, lo que representa un aumento del 16,8% respecto al mismo periodo del año pasado. Sin embargo, el dato sigue estando por debajo de los niveles ‘prepandemia'.
En este sentido, de enero a agosto de 2019 se atendieron 40.149 personas en Urgencias frente a las 32.869 de este año, lo que representa un descenso del 18,1% en dos años. El responsable de este servicio, el doctor Francisco Muela, reconoce que ha disminuido la presión asistencial en Urgencias, si bien destaca que han experimentado un crecimiento del 180% respecto a 2019 en la atención a personas «con índice de prioridad asistencial bajo, es decir, que podría haber sido atendido en Atención Primaria» con, por ejemplo, «cuadros de dolor que podrían haber sido atendidos en las Urgencias de Atención Primaria o bien con el médico de familia».
Pese a la bajada de presión asistencial en todo el hospital, incluido Urgencias, este servicio permanecerá dividido en dos partes. «Se mantiene el doble circuito en Urgencias; esto ha cambiado nuestra forma de trabajar habitual ya que los profesionales que atienden a pacientes con coronavirus no pueden hacer otra cosa, de manera que se complica el día a día. De ahí se explica que tengamos un aumento en la saturación de Urgencias habiendo disminuido la presión asistencial», precisa Muela.
Intoxicaciones por drogas
El doctor Muela afirma que este año han bajado los casos de intoxicaciones por drogas, pero por el momento no tienen datos concretos ya que el balance se hace al final de año. «Los casos de drogas clásicas ha bajado, que son lo que sería la cocaína, éxtasis, GHB que no lo hemos visto prácticamente en casos de Urgencias este año». Muela explica que «la gente sigue consumiendo igual, sólo que hay menos turistas, menos presión de población y, por eso, ha bajado la presión asistencial en el servicio de Urgencias». La droga que más se consume continúa siendo el cannabis y sus derivados, pero esto genera «poca presión en Urgencias». Por contra, la cocaína se mantiene como la sustancia que hace llegar más casos a este servicio del hospital, «es la que más se atiende en Urgencias», precisa Muela.
Asimismo, se mantiene el perfil de persona que llega a Urgencias y tiene en su cuerpo varias sustancias estupefacientes, no sólo una: «Lo habitual es que atendamos casos de multiconsumo». En paralelo a la caída del consumo de drogas se encuentran las intoxicaciones etílicas, «que han existido siempre y siempre nos llegan, pero quizá al haber disminuido las drogas de abuso de otro tipo sí que llaman más la atención».
En cuanto a los medicamentos, el responsable del servicio de Urgencias destaca que el paracetamol es la droga «que más intoxicaciones genera», aunque destaca que se deben consumir muchos gramos para llegar a intoxicarse, a la que se suman las benzodiacepinas, como el Valium o el Diazepam. De hecho, el responsable del servicio de Urgencias explica que siempre se suelen atender «más casos por intoxicaciones de paracetamol y benzodiacepinas que por drogas ‘de recreo' como la cocaína o el GHB».
Intentos autolíticos
Sobre si estos dos años de pandemia han hecho llegar más casos de intoxicaciones por benzodiazepinas a Urgencias, el doctor Muela señala que han detectado más casos «de intención autolítica. Creemos que sí que estamos viendo más intoxicaciones y, además, otros intentos de autolesiones. Ya han avisado los Observatorios de Suicidio sobre estos intentos autolíticos y sí que parece que hay una relación con la pandemia, pero no disponemos de datos exactos», concluye.