El cold ironing es, básicamente, la tecnología que permite que las embarcaciones de gran tamaño puedan conectar sus sistemas eléctricos a puerto sin necesidad de consumir combustible propio y evitando enviar a la atmósfera emisiones tóxicas. El puerto de Palma será el primero de España en el que entrará en funcionamiento un sistema que, según explicaron ayer fuentes de la Autoridad Portuaria de Baleares (APB), es de obligada implantación por la Ley de Cambio Climático. Ibiza tendrá también cold ironing aunque no se sabe cuándo ni de qué manera.
La APB ha consignado ya cuatro millones de euros de presupuesto para implantar esta tecnología en el puerto de Vila. Pero, de momento, «no hay ni proyecto». Y es que la APB quiere primero comprobar el funcionamiento del sistema que se empleará en Palma, del que se encargará Endesa, para ver si es posible trasladarlo al resto de puertos que gestiona en el Archipiélago.
Baleària y Trasmed
En el caso de la capital balear, la instalación entrará en funcionamiento «en unos dos meses» y, según señalaron las mismas fuentes, se trata de «un proyecto de cold ironing en baja y media tensión» para cuya implantación la entidad ha contado con la colaboración de las navieras Trasmediterránea y Baleària.
Precisamente, la gasística Redexis ha presentado un proyecto similar para Ibiza con el fin de lograr financiación de los fondos europeos Next Generation. Sin embargo, desde la APB señalaron que «aunque ambos proyectos pueden confluir» no tienen de momento nada que ver. Puntualizaron, eso sí, que «podría ser que Redexis se encargue de llevar hasta el puerto la energía necesaria para los barcos pero la instalación en sí depende de la APB».
Fuentes de la Conselleria de Fondos Europeos, por otro lado, indicaron que, efectivamente, el proyecto de Redexis cuenta con el respaldo del Govern. Pero, sorprendentemente, dijeron no conocer nada sobre el de la APB, por lo que es difícil confirmar si se trata del mismo o de otro diferente.
Las mismas fuentes explicaron que el de Redexis se basa «en una instalación eléctrica en el puerto de Vila para cruceros y ferries» e insistieron en que «está en absoluta sintonía con el Govern».
Desde esta conselleria se aclaró también que los fondos europeos financiarán en Baleares investigaciones tendentes a comprobar cómo se puede implantar el uso de los barcos eléctricos en las Islas. «En los proyectos de los fondos europeos», señalaron, «se quiere avanzar en la descarbonización del mar pero se trata de un enfoque a largo plazo». No sucederá lo mismo con esta primera fase de cold ironing, que, según subrayaron, «es algo que se hará pronto».
La descarbonización, según estas fuentes, se quiere trasladar a «otras áreas». De ahí que uno de los objetivos de la gestión de los fondos Next Generation sea potenciar la investigación en este sentido y con el fin de «pensar a largo plazo en la sostenibilidad».
Todo en el aire
«Se contempla una futura electrificación del transporte marítimo en general pero todo está por desarrollar», añadieron. Estas investigaciones se llevarán a cabo en «centros de innovación» cuya financiación también prevén los fondos europeos. Unos fondos, finalmente, que «están abiertos y para los que no paran de salir proyectos».
Estos fondos son «un plan vivo que va teniendo líneas que se abren constantemente para cosas muy concretas». «Es», concluyeron, «algo muy complejo y que no se cierra».