Los barcos del muelle de pescadores del Puerto de vila presentan un nuevo elemento en sus estructuras, una pequeña placa solar que acompaña a una caja azul colocada a su lado. Se trata, pese a su color, de la Caja Verde que ayer presentó la consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Mae de la Concha junto al director general de Pesca y Medio Marino, Joan Mercant, y de José Luis Beloso, de la empresa responsable de la fabricación del dispositivo, Satlink.
En las Pitiusas se van a instalar 77 Cajas Verdes, 22 en Formentera y 55 repartidas en las cofradías de Ibiza. De la Concha explicó que las Cajas Verdes registran los datos de cada barco, «dónde está, a qué velocidad se mueve, en qué zona está pescando». Los dispositivos se han acogido «con bastante consenso, aunque siempre hay escépticos, pero creemos que las ventajas que tiene son tan evidentes que a corto plazo todo el mundo estará convencido de las ventajas que tiene para los pescadores».
Las ventajas a las que se refiere la consellera giran en torno a los días de pesca que tienen, 210 al año, y que «teniendo en cuenta la temporalidad que hay aquí, con una demanda muy superior en verano, con estas cajas se podrán distribuir como el pescador quiera. No deberá guardar el día de descanso y luego se compensará durante el invierno, cuando hagan las paradas que consideren convenientes», aseguró de la Concha, «pescarán menos días pero le sacarán más provecho» apuntó Mercant. El director general quiso agradecer la colaboración de los profesionales del sector, «todos están muy contentos».
Nuevo Plan de Gestión
La consellera quiso aprovechar su presencia en Ibiza para presentar el borrador del nuevo Plan de Gestión para la pesca profesional artesanal en aguas interiores de las Pitiusas, un plan que se está elaborando con «una gestión compartida, en la que están implicados consells, cofradías o ONGs». El nuevo plan contemplará la distribución de horas a criterio del pescador, al igual que también pretende terminar con la incompatibilidad a la hora de pescar langosta y pescado. La consellera explicó que «a partir de ahora se podrán hacer las dos cosas, con la condición de que las redes de langostas no están más de 24 horas en el mar».
Ningún pescador de ninguna cofradía asistió a la presentación, El director jeneral lo justificó porque «hay una ventana de tiempo que han querido aprovechar, porque saben que mañana no van a poder pescar, y el gerente se ha tenido que ir de repente por algún tema personal». Pere Varela, responsable comercial de Peix Nostrum pudo atender a los medios y denunciar la satisfacción mostrada en las declaraciones de los responsables del Govern.
«La instalación de estas cajas es una imposición, y todo lo que sea impuesto no nos gusta» declaró Varela que, no obstante, reconoce que «a la larga puede ser una herramienta que nos vaya bien, sabremos en todo momento dónde está cada embarcación y cuánto ha capturado, de manera que podremos valorar el estado de los caladeros». Varela reclama más medios humanos para poder hacer un control efectivo de la pesca que se realiza en aguas pitiusas, ya que «no toda se hace desde el sector profesional», en alusión al volumen de pescado capturado desde la pesca recreativa.
Caja Verde
José Luis Beloso, de la empresa responsable de la fabricación del dispositivo explicó que cada Caja Verde dispone de un Sistema de Posicionamiento Global GPS y un módulo de comunicaciones inalámbricas GSM/GPRS.
En su funcionamiento normal, la Caja Verde se conecta al Centro de Recepción (CR) mediante el sistema GPRS y envía de forma periódica las localizaciones de la embarcación, normalmente cada tres minutos, así como cualquier incidencia de funcionamiento detectada. En caso de pérdida de cobertura de comunicaciones, la Caja Verde registra las posiciones en una cola que vuelca al CR una vez recuperada la cobertura. En caso de no poder establecer las comunicaciones vía GPRS, la Caja Verde efectúa la comunicación mediante el canal de backup GSM (SMS).