El Pleno de Sant Antoni dio luz verde ayer, con los votos en contra de PSOE-Reinicia, a la revisión de precios de la contrata del agua, suscrita en la anterior legislatura precisamente por el equipo de gobierno formado por PSOE-Reinicia y El Pi. Esta revisión del precio de agua, que implica una subida en el precio de la factura del 7,18%, estaba marcada por contrato en el pliego de condiciones de la contrata a la empresa Facsa, que se cerró a finales del año 2018. El hecho que PSOE-Reinicia votara ayer en contra de dar cumplimiento a lo que ellos mismos pactaron en el pliego de condiciones de este contrato en la legislatura llamó poderosamente la atención tanto del alcalde Marcos Serra como del concejal Joan Torres. El primer edil recriminó a PSOE-Reinicia que votaran en contra de algo que ellos mismos habían cerrado en la anterior legislatura, a lo que el concejal Simón Planells contestó que no era el momento de ejecutar esta subida de precios pese a que estuviera por contrato.
Tampoco hubo acuerdo en la propuesta presentada por el PP para exigir al Gobierno de Pedro Sánchez que no modifique la Ley de Seguridad Ciudadana en señal de apoyo a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, una iniciativa que finalmente no salió adelante por la abstención de Cs y los votos en contra de PSOE-Reinicia, Unidas Podemos y El Pi.
La polémica también estuvo servida con la escultura de Enrique Saavedra. PSOE-Reinicia calificó de «insulto a la ciudadanía» haber comprado esta escultura sin consultarlo, mientras que el equipo de gobierno defendió que ésta es una apuesta más para modificar el modelo turístico de Sant Antoni.