La empresa encargada de las obras de reforma del hotel Piscis Park de Sant Antoni provocó este sábado que gran parte de los establecimientos que comparten inmueble con el establecimiento hotelero se quedaran al mediodía sin luz.
Los trabajadores de la constructora encargada de la reforma volvieron a recobrar protagonismo una semana más. Si hace siete días dejaban sin gas a la práctica totalidad de la localidad tras romper con una excavadora una de las arterias suministradores, en la jornada de este sábado cambiaron las tuberías por los cables.
Al parecer, según fuentes presenciales, uno de los encargados de la obra ordenó a unos trabajadores que «cortaran» una serie de mangueras portacables, son tener conocimiento de a qué estaban destinadas.
En cuanto lo hicieron, al menos tres de los negocios existentes en los bajos del hotel, una tienda de souvenirs, un alquiler de motos y un banco, se quedaron automáticamente sin suministro eléctrico. Y es que una de las mangueras que ordenaron cortar a los operarios era la derivación eléctrica de Gesa para estos establecimientos.
El único de ellos abierto al público este sábado, la tienda de souvenirs, se vio obligado a cerrar hasta que la constructora reparó la avería.