El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí, ha expresado este lunes su satisfacción con la sentencia sobre Benirrás y ha considerado que la resolución demuestra que el Ayuntamiento "nunca ha dado licencias de manera improcedente".
En un comunicado, Marí ha afirmado que los propietarios afectados por la anulación de licencias en Benirrás han sufrido una "injusticia consumada únicamente por el Govern".
Marí ha reiterado que el Ayuntamiento "siempre ha mantenido que nunca se había otorgado una licencia constructiva en la zona que estuviera mal dada" y, así, la anulación de estos permisos "sólo responde a la voluntad política del equipo de gobierno progresista de la Comunidad en 2017".
El alcalde ha recordado que, desde el primer momento, el Consistorio lamentó "la imposición a la que ha estado sometido por un Govern que ha interferido en la planificación urbanística del municipio por decreto ley y con absoluta unilateralidad".
Según el alcalde, en este caso se debería haber negociado con los propietarios con quienes se habría podido llegar a un pacto beneficioso para todas las partes.
El alcalde ha concluido que la sentencia "avala el comportamiento que en todo momento ha tenido el Ayuntamiento" y que exige al Govern responsabilidad por las decisiones unilaterales que, sin consenso, han dejado sin derechos a los propietarios de Benirrás".