La decisión de Autoridad Portuaria de Baleares (APB) de prohibir la simultaneidad de maniobras en los puertos de las Pitiusas para tratar de descongestionar las rutas marítimas sigue cuestionándose en el sector náutico pitiuso.
El motivo es que esta medida, por la que se establece la ordenación y asignación de atracos a los muelles de Ibiza y la Savina, implica que los buques de esta línea regular realizarán las maniobras uno por uno en las Zonas de Navegación Restringida cercanas a los atracos asignados a esta línea en cada uno de los puertos.
Lo que significa, según el delegado de la Asociación de Patronales de Empresarios de Actividades Marítimas de Balears (Apeam), Rafael Cardona, una reducción de las frecuencias marítimas entre las Pitiusas.
«Con esta ordenanza de APB se reducirán un 25% los viajes entre Ibiza y Formentera en temporada alta. Si tenemos en cuenta que cada verano se han llegado a programar 160 rutas, tras esta medida prevemos que la cifra no sobrepasará los 100 trayectos diarios», señaló Cardona.
Nuevos horarios
De momento, estos nuevos horarios, que sirven para evitar la concurrencia marítima, ya son toda una realidad en ambos puertos desde el pasado 8 de abril puesto que los ferrys ya no salen exclusivamente a las horas en punto e y media. Se trata de una fase de prueba para comprobar cómo responderá el desarrollo de esta medida.
En este sentido, Cardona adelantó a Periódico de Ibiza y Formentera que las navieras están programando ahora sus servicios para presentar su propuesta a la APB.
«Una vez la ordenanza se publique en el Boletín Oficial del Estado, que será esta semana, las diferentes compañías entregarán sus demandas a la entidad marítima», puntualizó el delegado de la Asociación de Patronales de Empresarios de Actividades Marítimas de Balears.
Por su parte, desde APB explicaron que están esperando estas solicitudes para autorizar o modificar las diferentes propuestas en aras de favorecer el transporte marítimo entre las Pitiusas. «Antes del 15 de mayo, estará disponible la nueva programación de los trayectos este verano», subrayó con seguridad Cardona.
Repercusión económica
Esta reducción en las frecuencias marítimas no solo afectará al número de rutas programadas, también implicará, según informaron desde Apeam, un posible impacto económico.
«De momento, todo es una incertidumbre. No obstante, sí que tenemos en cuenta que, una vez la ordenanza entre en vigor, alguna naviera tendrá que prescindir de alguna embarcación», señalaron.
En este sentido, Cardona adelantó que esta intervención supondrá una reducción también en la oferta de trabajo. «Si esta pérdida no se compensa con más ocupación en los otros servicios marítimos, perderemos todos. Tanto las empresas como los pasajeros», explicó escéptico.
Sin embargo, se quiso mostrar prudente y señaló que es importante esperar para ver los resultados de una temporada que, según el delegado de la Apeam, se espera «como agua de mayo».