Este martes por la mañana la cultura y la música de Ibiza se levantó con polémica. Todo tras las palabras del director insular de Cultura del Consell de Ibiza, Miquel Costa, en las que se quejaba de la celebración el sábado 28 de mayo de dos de los grandes eventos musicales programados para esta temporada en la isla, el Contrast Festival enSant Antoni y el Sant Pepe Rock de Sant Josep.
A través de un escrito en su perfil personal de la red social Facebook, Costa criticaba abiertamente y sin tapujos lo que llamó «contraprogramación» preguntandose «si era esa su lealtad institucional» y si era «su forma de contribuir a la cultura musical». Incluso, daba un paso más asegurando «que nadie se atreva a decir que no lo sabían porque el trabajo de un programador cultural es conocer los eventos coincidentes para no solaparse».
Para argumentar sus afirmaciones incluía distintas publicaciones de prensa de medios locales y nacionales que se hacían eco de la presentación en marzo en Nueva York de este festival que se celebrará el 27 y 28 de mayo en Sa Punta des Molí de Sant Antoni «con un elenco de artistas de talla mundial como Marky Ramone (Ramones), Clem Burke (Blondie y Eurythmics), Sophie Auster o Sean Yesult».
Unas horas después Miquel Costa se mostró algo más calmado a Periódico de Ibiza y Formentera queriendo dejar claro que «en ningún momento» sus críticas iban dirigidas «a los artistas, técnicos, montadores y todos aquellos que trabajarán intensamente para intentar recuperar lo mucho que han perdido en la pandemia» pero sí contra «los promotores del Sant Pepe Rock 2022».
A ellos directamente les acusó de «poner el mismo día dos eventos con perfiles de público muy parecido sin la profesionalidad de haber consultado las fechas del Contrast Festival porque eso es lo primero que tiene que hacer un programado cultural».Finalmente, calificó de «gran desacierto la decisión por el perjuicio que generará para la isla, los músicos y todo aquel que tiene su trabajo relacionado con los conciertos».
Miquel Prats ‘Botja'
Uno de los principales aludidos en las críticas del director insular de Cultura fue Miquel Prats, Botja, impulsor del Sant Pepe Rock desde sus inicios hace ya un cuarto de siglo.
En declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera el músico y promotor cultural quiso mostrarse conciliador y aunque asumió parte de su error «por no conocer las fechas exactas del festival del Consell de Ibiza» también quiso dejar claro que «tal vez hubo falta de comunicación» de la máxima institución insular «a la hora de promocionar y difundir cuando y donde se iba a celebrar».
Además, confirmó que durante la preparación de los conciertos de Sopa de Cabra y Joven Dolores a partir de las 21.30 horas en el aparcamiento de las piscinas «se barajaron varias fechas con el Ayuntamiento de Sant Josep y que al final ante la cantidad de eventos de estos meses se decantaron por el 28 de mayo con el handicap además de celebrarse con la final de la Champions League de fútbol».
Por último, Miquel Botja, aseguró que ojalá «el lío se pudiera solucionar porque esa contraprogramación de la que habla Costa no es tal porque todo se ha hecho sin ningún tipo de maldad».
Ayuntamiento de Sant Josep
Finalmente, el tercer involucrado en la polémica, el Ayuntamiento de Sant Josep, explicó a Periódico de Ibiza y Formentera «que en la mayoría de los casos resulta muy complicado cerrar una fecha con unos grupos tan demandados como los del Sant Pepe Rock de este año, Sopa de Cabra y Joven Dolores, y ésta del 28 de mayo era la única posible».
Incluso, de forma irónica aseguraron «que no se nos ocurre acusar a la UEFA de contraprogramarnos con la final de la Champions League».
En este sentido, para suavizar la polémica el consistorio se mostró convencido de que «hay suficiente público para ambos eventos, tanto el que promueve el Consell de Ibiza en Sant Antoni y que incluye un dj, como para el festival de música en vivo Sant Pepe Rock que se celebra desde hace casi 30 años» y aseguraron «que querer culpar de sacar espectadores de uno y otro es absolutamente absurdo e injusto con el trabajo que se hace para llevar a Sant Josep acontecimientos atractivos para los ciudadanos y sin voluntad de contraprogramar a nadie».
Por último, confirmaron «que los eventos no se planifican de acuerdo con lo que hacen los demás sino pensando en atraer el mejor talento siempre que es posible».