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Dos años de cárcel por zarandear con fuerza a su bebé de cinco meses

El acusado, brasileño de 22 años, zarandeó «con fuerza y de forma brusca» a la pequeña para que dejase de llorar

Imágenes del condenado ante el Tribunal.

| Ibiza |

Dos años de prisión. Es la pena impuesta este jueves por un tribunal de la Audiencia Provincial a un joven de 22 años y origen brasileño, padre de una niña a la que causó graves lesiones cuando era un bebé de apenas cinco meses y a la que zarandeó «con fuerza, de forma brusca y en repetidas ocasiones» para que dejase de llorar. Los hechos ocurrieron la mañana del 24 de enero de 2020 en el domicilio donde la familia vivía en Ibiza. Ayer, ante el tribunal de la Sección Primera, el joven ratificó el acuerdo de conformidad que previamente habían alcanzado su defensa y el Ministerio Fiscal, que inicialmente solicitaba una pena de 11 años de prisión.

La defensa también ha solicitado un nuevo informe forense para valorar las secuelas de la pequeña y ha pedido la suspensión de la pena de prisión.

Al hombre se le acusaba de un presunto delito de lesiones agravado por causación de pérdida o inutilidad de órgano principal y la circunstancia agravante de parentesco.

La Fiscalía solicitaba inicialmente una pena de 11 años de prisión, la prohibición de comunicarse y acercarse por 15 años con la menor y la privación de la patria potestad sobre la misma.

Zarandear con violencia

Según el escrito del fiscal, los hechos se remontan a primera hora de la mañana del 24 de enero de 2020, cuando el hombre se quedó al cuidado de su hija menor, de sólo cinco meses, en el domicilio familiar de Ibiza, mientras la madre acudía a su puesto de trabajo.

De acuerdo con la Fiscalía, la menor comenzó a llorar y, «con ánimo de menoscabar su integridad física y aceptando las consecuencias que podían derivarse de su acción», el hombre zarandeó «de forma violenta y brusca» a la menor causando a la misma severas lesiones craneoencefálicas y cerebelosas que condicionarán de forma importante el normal funcionamiento de la menor.

A consecuencia de estos hechos, la menor presenta un retroceso en el desarrollo evolutivo y actividad encefálica irregular.

De hecho, según el fiscal, no se puede descartar «la necesidad de ayuda de terceras personas para las actividades básicas». La defensa ha solicitado un nuevo informe forense.

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