Los sindicatos SIMEBAL, SATSE, USAE, FSTES y CGT condenan «enérgicamente cada uno de estos miserables actos y manifestar nuestra solidaridad para con las víctimas», según han expresado este miércoles en una nota de prensa. Por otro lado, denuncian la «pasividad del IBSalut a la hora de implementar medidas que prevengan y reconozcan los riesgos inherentes al desempeño profesional de los trabajadores del servicio público de emergencias médicas de las Islas Baleares».
Estas reacciones surgen como consecuencia de que en la noche del 11 de agosto un médico y un técnico de emergencias del SAMU 061 fueron agredidos física y verbalmente durante su asistencia a una paciente ebria y a principios de julio otro médico del SAMU 061 fue golpeado con dureza por otro turista enajenado por las drogas.
«¿Cuántas agresiones deben soportar los sanitarios del SAMU 061 para que la Consellería de Salut asuma la peligrosidad y el riesgo al que están expuestos? ¿Cuántas agresiones, accidentes laborales y enfermedades profesionales necesita el IBSalut para implementar medidas que compensen la peligrosidad y la penosidad que asumen en su labor asistencial los médicos, enfermeros y TES del 061? ¿Cuántas agresiones y lesiones necesita la Gerencia 061 y GSAIB para implementar un Plan de Autoprotección específico para el SAMU 061?», se cuestionan desde los sindicatos.
Las organizaciones sindicales SIMEBAL, SATSE, USAE, FSTES y CGT, en representación de los trabajadores del SAMU 061, exigen a los responsables de la Sanidad Pública Balear que tomen con urgencia medidas pertinentes para prevenir las agresiones y accidentes laborales y, a su vez, que «reconozcan que los sanitarios del servicio de emergencias SAMU 061 asumen, en su tarea diaria en las ambulancias y helicópteros, riesgos laborales de alta peligrosidad con objeto de velar por la salud de los ciudadanos», destacaron en el comunicado.