La Asociación de Taxistas Autónomos de la Ciudad de Ibiza ha interpuesto contra el Ayuntamiento de Ibiza un recurso ante el Juzgado Contencioso Administrativo número 2 de Palma de Mallorca por el calendario de libranzas. Así viene reflejado en el BOIB del pasado 18 de agosto.
Desde el colectivo, el presidente Alejandro Cardell ha recordado este lunes que «ya dijimos que íbamos a hacer valer nuestro derecho», en relación a la medida judicial.
«Esto no puede ser. Existen días libres, pero el concejal pretende hacerlo de esta manera y, para nosotros, cerrar el taxi no es la forma», aclaró Cardell.
Según explicó también, a pesar de acatar desde hace meses las órdenes decretadas por el Ayuntamiento sobre las libranzas de los taxistas, el recurso ha sido interpuesto ahora puesto que «ha habido un montón de decretos» y «cuando ha tocado, hemos seguido el proceso, presentando primero el recurso ante el Ayuntamiento y luego se ha llevado al Juzgado».
Cardell consideró que, a estas alturas de la temporada, para el colectivo son más que evidentes los perjuicios que les ocasiona el decreto de libranzas, con 35 taxis paralizados día tras día, a pesar de las largas colas de usuarios demandando un servicio. «Morrás cree que está haciendo política y lo que está provocando es un perjuicio a los empresarios que también viven de esto», insistió el presidente de los autónomos.
El concejal de Movilidad en Vila, Aitor Morrás, manifestó sobre ello que los taxistas «están en su derecho a presentar los recursos que crean oportunos».
Según señaló además, estos profesionales saben «perfectamente» que el Ayuntamiento es competente para establecer el calendario, algo que hizo en tiempo y forma. «Los taxistas llevan instrumentalizando la vía judicial desde hace décadas para evitar avances en la mejora del servicio público. No sería la primera vez que el Juzgado de lo Contencioso les deniega la razón dándosela al Ayuntamiento», consideró Morrás.
En este sentido, Morrás se refirió al pasado mes de abril, cuando el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Palma aceptó las alegaciones del Ayuntamiento y anuló las medidas cautelarísimas que había solicitado la Asociación de Taxistas Autónomos de la Ciudad de Ibiza contra el decreto municipal por el cual se rescindía el convenio del GPS y se ordenaba la suspensión de su uso.
El edil también dijo que a los taxistas «ya les viene bien» el recurso para retrasar la acción institucional simplemente con lo que puedan suponer las posibles medidas cautelares que se decreten.
Grupos de taxistas asalariados de Ibiza han manifestado este lunes a Periódico de Ibiza y Formentera que, en su caso, se muestran a favor del calendario de libranzas, aunque creen que la medida debería aplicarse de otra forma, sin paralizarse el vehículo durante toda una jornada. «Se podría hacer de otra manera», insistieron.
Estos profesionales destacaron la importancia de «desconectar» un día del trabajo, más a nivel psicológico que físico, puesto que algunos asalariados, en temporada alta, podían tardar varios meses en disfrutar de un día libre.
La polémica
Desde que la Concejalía de Movilidad de Vila hizo públicas sus intenciones de aprobar el calendario de libranzas para los taxistas del municipio las críticas del colectivo de autónomos han sido continuas.
Un decreto del Ayuntamiento de Ibiza fijó el calendario de servicios y libranzas para el sector en el periodo comprendido entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2022. Entre otras cuestiones, dicho decreto reflejaba que el Reglamento del servicio de transporte urbano de viajeros en automóviles ligeros de alquiler con conductor indicaba que «corresponde al Ayuntamiento establecer las medidas de organización y ordenar el servicio en materia de horarios, calendarios, descansos o vacaciones».
El rechazo de los taxistas al documento municipal fue tal que organizaron varias protestas en Vila exigiendo la suspensión de una medida que obliga a los vehículos a parar un día a la semana, también en temporada turística. Precisamente, este verano uno de los problemas que más se ha agravado en el municipio es la falta de taxis.
Para justificar esta decisión, el concejal de Movilidad aseguró que su voluntad es ofrecer un servicio de taxi «seguro, de calidad y en el que los conductores estén descansados».
También recordó meses atrás que no tenía inconveniente en modificar el calendario si los taxistas aceptaban la instalación de un dispositivo que identifique al conductor, «pero ellos no lo quieren poner», aclaró.