El pecio del Aria SF se ha dado este lunes por oficialmente descontaminado, aunque «siempre puede haber el riesgo de que haya una zona donde se haya acumulado algo de gasoil que no ha podido ser detectado dadas las condiciones, pero en principio está descontaminado». Así de claro se has mostrado este lunes el portavoz de Salvamento Marítimo de las Pitiusas, Miguel Chacón, quien recordó que durante la jornada del domingo «se dio el tercer repaso a los seis tanques de combustible con que contaba la embarcación».
Asimismo, informó que se había procedido a la retirada de la barrera desplegada en la zona del hundimiento para prevenir que se esparcieran posibles vertidos de carburantes, además de haberse extraído las baterías del yate de lujo.
Tras estas labores, y hasta el momento del reflotamiento de la embarcación, «permanecerá en la zona una embarcación en vigilancia constante» por si se produjera algún vertido de una zona de almacenamiento de combustible no localizada.
En estos momentos Capitanía Marítima está a la espera de que el armador del Aria SF presente el proyecto de reflotamiento de la embarcación incendiada, que en estos momentos se está ultimando. Una vez que reciba el visto bueno se procederá al inicio de los trabajos.
El capitán marítimo, Luis Gascón, aseguró que la prioridad ede la operación en un principio era sacar todos los restos del pecio que pudieran suponer una contaminación, entre ellos el aceite hidráulico que pudiera haber en pequeños tanques de la embarcación, así como en el timón.
Estas labores se han llevado a cabo con una tecnología puntera que se denomina hot tapping, y que consiste básicamente en la succión controlada de estos líquidos mediante un tubo hacia la superficie, para posteriormente trasladarlos a un gestor de residuos autorizado en tierra.
Gascón indicó a su vez que la empresa contratada por el armador para realizar estas funciones de extracción de contaminantes es «una empresa puntera a nivel nacional», y que una vez que finalice su trabajo «se procederá al reflotamiento del barco con maquinaria pesada para trasladarlo a un astillero de la Península que proceda a su desguace». Y es que, según destacó, la propiedad de la embarcación «está obligada, a instancias de la autoridad marítima», en este caso el propio Capitán Marítimo de Ibiza y Formentera, «a retirarlo».
Luis Gascón subrayó a su vez que no se puede calcular el tiempo que durarán estos trabajos, ya que pueden ir de unos días a varias semanas. «No es tan fácil posicionar esta maquinaria pesada», insistió. «A lo mejor tiene que desplazar desde Holanda una pontona flotante y eso requiere su tiempo, pero todo está en marcha», sentenció.
Por su parte el delegado insular de la Administración del Estado en Ibiza y Formentera, Enrique Sánchez, aseguró que en el operativo del traslado del Aria SF desde Cala Saona hasta las costas de Cap Martinet se tomó la decisión «menos mala» con el fin de provocar el menor impacto posible y facilitar las labores de descontaminación y reflotamiento del pecio.