La entidad ecologista Amics de la Terra ha emitido este lunes un comunicado para cuestionar la eficacia de las desaladoras en la recuperación de los acuíferos y ha tildado de «gestión envenenada» esta decisión del Govern. «La gestión de los recursos hídricos es más compleja y requiere una visión más amplia basada en criterios coherentes, además de una reducción de impactos ambientales en todas los ámbitos», explican.
En este sentido, recuerdan que actualmente hay 5.352 pozos autorizados en las Pitiusas y alertan de que esta cifra «va en aumento año a año con cada nueva construcción en suelo rústico». También recuerdan que se está proyectando ampliar un 18% el caudal de agua desalada de Ibiza y se contempla ampliar la capacidad de producción de las desaladoras de Santa Eulària y Sant Antoni en 1.500 toneladas al día.
Afirman que la gestión actual de los recursos hídricos es «incoherente, contradictoria y está lejos de adaptarse a los límites que nos impone la climatología y el territorio insular». En este sentido afirman que se deben dejar de autorizar más pozos, así como realizar «controles y restricciones al consumo de agua mediante tarifas disuasorias y un límite al consumo, tanto el consumo de agua de red, como de camiones que venden agua a particulares», mejorar la depuración de las aguas fecales, implementar medidas y mejoras para poder reusar el agua depurada y realizar cambios en la gestión de torrentes para así fomentar la filtración de las aguas pluviales al subsuelo, «que implicaría no usar maquinaria pesada que compacte el lecho de los torrentes y dañe las laderas», concluyen.