El concejal del PI en Sant Antoni, Joan Torres, ha intentado, sin éxito, cobrar el mes de vacaciones que le corresponde del año 2022. Según ha podido saber este periódico, el concejal pidió el pasado mes de noviembre que le abonaran su periodo vacacional al no haberlo disfrutado durante el año. Sin embargo, el Ayuntamiento se ha negado ya que, a diferencia de los funcionarios municipales, los concejales de la corporación no tienen la obligación de fichar, por lo que les resulta imposible saber los días que se ha ausentado de su puesto de trabajo.
El alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra, expulsó a Joan Torres del equipo de gobierno el pasado 29 de noviembre después de que el concejal del PI bloqueara la aprobación de los presupuestos municipales para el año 2023. Una decisión que dejó al equipo de gobierno en minoría. El conflicto también se llevó por delante al teniente de alcalde de Ciudadanos, José Ramón Martín, que dejó de forma voluntaria sus responsabilidades en el equipo de gobierno. El salario aprobado en 2019 para los tenientes de alcalde, entre ellos Joan Torres, era de 36.375,50 euros anuales.
Esta semana, el alcalde Marcos Serra se ha quejado de la labor de la oposición en los últimos plenos, en los que han votado en contra de «cosas tan básicas como la limpieza de la playa, la jardinería o de arreglar unas simples ventanas de la biblioteca». «También votaron en contra del Plan contra incendios forestales y de eliminar una plaza delineante para ponerla en servicios sociales y así poder recibir una subvención del Consell y el Govern por valor de 800.000 euros, prefieren rechazar esta subvención y tener una delineante que es una plaza vacante desde hace un año». «Si no quieren arreglar nada que lo digan. Sólo les pediría que me hicieran una moción de censura que por eso son mayoría y que gobiernen ellos y sino al menos que no bloqueen la acción de gobierno que todo lo que hacemos es para los vecinos y el municipio de Sant Antoni», apuntó Serra.