La delegación ibicenca del Colegio Oficial de Arquitectos de las Islas Baleares (COAIB) recordó ayer que los datos de que disponen sobre las viviendas de protección oficial les son facilitados directamente por el Instituto Balear de la Vivienda (Ibavi), dependiente de la Conselleria de Vivienda dirigida por el ibicenco Josep Marí Ribas Agustinet.
Los arquitectos explicaron que, como los proyectos de VPO no se visan, «los datos que manejamos son los que nos proporciona el propio Ibavi». Asimismo, precisaron que el criterio que siguen «para que consideremos las viviendas en nuestra estadística es cuando se han iniciado las obras, y no antes». En este sentido, apuntaron que en la estadística de 2023 ya aparecerán dos proyectos de VPO, concretamente 60 viviendas en la avenida Isidoro Macabich de Vila, que aún están pendientes de la licitación de las obras y que se estima que se empiece en julio de este año, y otras 17 viviendas en Formentera, pendientes del inicio de las obras, que estaba previsto paras este mismo mes de marzo.
Hay que recordar que Marí Ribas explicó este pasado lunes y ayer mismo en el Parlament desconocer de dónde sacaba sus datos el Colegio de Arquitectos, y había asegurado que sí que se habían proyectado nuevos proyectos en los últimos dos años, los últimos de ellos 60 viviendas de Ca n'Escandell, «mientras que en Formentera estamos a punto de poner la primera piedra de la segunda promoción de VPO y pronto podremos hablar de otro solar que nos cederán», aseguró el conseller.
También indicó que su Conselleria «ha hecho cuatro compras de viviendas por tanteo y retracto y hay cinco viviendas adquiridas por ocupación temporal a los grandes tenedores». Asimismo, adelantó que están a la espera de que el Consell d'Eivissa «haga una desafectación de un terreno que podía ceder para hacer viviendas», algo de los que han hablado ambas administraciones pero que «a día de hoy no se ha firmado ningún convenio».