El Consell d'Eivissa y el Ayuntamiento trabajan contrarreloj en estos momentos para conseguir sacar adelante el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio de Ibiza. El documento está pendiente solo del visto bueno de la Demarcación de Costas de Baleares al informe de impacto medioambiental. Un visto bueno que, de momento, no se ha producido, pero para el que ambas administraciones están presionando al organismo estatal «a diario», según ha explicado el alcalde de Vila, Rafa Triguero. Y es que la fecha límite es la del próximo 14 de julio. Si antes de ese día no se ha recibido el informe, será «catastrófico», en palabras del presidente insular, Vicent Marí.
El presidente ha recordado que la máxima institución insular adelantó al pasado viernes día 23 de junio la sesión de constitución de la nueva corporación insular con el objetivo de poder conformar cuanto antes la Comisión para la Ordenación del Territorio, Urbanismo y Patrimonio Histórico, más conocida como la CIOTUPHA. Una comisión que, según ha explicado Vicent Marí este lunes, «estará constituida cuanto antes». El nuevo PGOU y todos sus informes deben pasar por este órgano antes de su aprobación definitiva. Y el informe de impacto ambiental que debe recibir el visto bueno de la Demarcación de Costas caduca el 14 de julio. «Estamos en contacto constante con la Demarcación de Costas de Baleares», ha señalado Vicent Marí, «estamos trabajando para que el informe llegue a tiempo. Cada día llamamos, tanto Vila como el Consell, para que el informe llegue».
El alcalde de Ibiza, Rafa Triguero, ha explicado, por su parte, que desde que accedió al cargo ha realizado todas las gestiones que estaban en su mano para conseguir sacar adelante el PGOU en los plazos previstos. Así, el pasado día 3 de junio se reunió con su antecesor en el cargo, Rafa Ruiz, para que este le proporcionara los contactos necesarios para poder trabajar en esta cuestión. Días más tarde, Vila remitió un escrito a la Demarcación de Costas pidiendo «priorizar» la revisión de este documento, que Triguero ha recordado que «es preceptivo» para poder aprobar el PGOU. «Estamos en contacto tanto con la Demarcación de Costas en Baleares como con Madrid», ha añadido el primer edil, «y me consta que su disposición es la de acelerar el trabajo. Hay que tener claro que, si este documento caduca, habrá que empezar de nuevo de cero. Por eso es tan importante que prioricen su revisión y que nos remitan el informe para que la CIOTUPHA pueda también hacer su parte».
Triguero, por otro lado, ha explicado que durante la reunión del Consell d'Alcaldes ha tratado con el presidente del Consell asuntos como la remodelación de la E-10 y el acondicionamiento de la E-20, además de otras cuestiones como el mantenimiento del proyecto de construcción de un carril-bici provisional en el primer cinturón de ronda de Ibiza. Un proyecto aprobado durante la anterior legislatura y que el nuevo equipo de gobierno ha decido mantener porque, según ha explicado el alcalde, «no afecta para nada a la remodelación de la E-10».
En el encuentro del Consell d'Alcaldes, además, Triguero ha puesto sobre la mesa otras cuestiones «prioritarias» para Vila como el transporte público o la necesidad de que Vila obtenga más fondos de la Ley de Capitalidad para poder ejecutar diversos proyectos, según destacó el alcalde del municipio de Ibiza.