El operativo conjunto entre la Policía Local de Ibiza y la Policía Nacional se ha saldado este fin de semana con la interposición de un total de 18 denuncias por la práctica del botellón. Los infractores fueron detectados por en tan solo una hora de recorrido por el barrio, según han informado fuentes del Consistorio de Ibiza. Este dispositivo especial entró en funcionamiento a mediados de este mes con la misión principal de luchar contra el incivismo que sufren los residentes en la zona desde hace tiempo.
En un primer momento, el operativo conjunto actuó para informar a los posibles infractores de las sanciones a las que se exponían si seguían realizando actividades irregulares como los botellones, que suelen celebrarse en los escalones que unen el paseo marítimo con la playa. Ahora, la Policía Local ya ha comenzado a interponer denuncias que acabarán en sanciones porque el Consistorio se ha propuesto entre sus objetivos el de recuperar la buena convivencia en el barrio.
Estas denuncias se presentan como incumplimientos de la Ordenanza para Fomentar y Garantizar la Convivencia Ciudadana y Conductas Cívicas e del Espacio Público de Ibiza, más conocida como «ordenanza cívica». Se trata de una normativa municipal que ahora ha cobrado especial relevancia, pues será la que regule todo lo relacionado con el consumo de alcohol entre menores mientras el Ayuntamiento redacta y aprueba una nueva ordenanza específica para combatir este problema. La ordenanza cívica prohíbe, entre otras cosas, el consumo de alcohol «en los espacios públicos fuera de los lugares en que se autorice expresamente». Además, prohíbe expresamente «el consumo de bebidas alcohólicas cuando pueda alterar gravemente la convivencia ciudadana», como es el caso de los botellones. En este caso, la infracción está considerada como grave y muy grave.
Fuentes del Ayuntamiento, por otro lado, han valorado de forma positiva los resultados que tiene de momento este dispositivo policial. No obstante, han reconocido que «aún queda mucho por hacer». «El objetivo», han recordado, «es incrementar la presencia policial en esta zona turística y residencial, donde se registra una elevada concentración de personas en horas punta, y evitar así el incumplimiento de diferentes ordenanzas, haciendo especial hincapié en las orden público y limpieza».
Las mismas fuentes han señalado que «al aumentar la presencia policial, se persigue, por un lado, la prevención del incumplimiento de estas ordenanzas y se mejora la eficacia en las actuaciones policiales, ya que permite responder de forma más inmediata en caso de registrarse incidencias».
Entonces la siguiente parada será del Hotel Mare Nostrum para adelante, no? Porque estamos cansados de ver a los guiris borrachos con los vasos del hotel o botellas en la mano deambulando por ahí. O a los turistas no se les toca? Pondrían 200 denuncias en una hora.