El Ayuntamiento de Ibiza activará en breve un plan de choque para modernizar y acondicionar las instalaciones del Centro de Protección Animal ubicado en sa Coma. Así lo ha explicado el concejal del área, Manu Jiménez, en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera. Jiménez ha afirmado que el centro está «muy saturado» pues, en estos momentos, tiene en acogida a 60 perros y entre 20 y 30 gatos. El Consistorio ha pedido ya presupuesto a diversas empresas para acometer diferentes trabajos en un complejo en el que, según ha señalado el edil, es necesario «hacer muchas mejoras».
Jiménez ha dejado claro que esta modernización es «muy importante» para el Consistorio puesto que es el «responsable del cuidado de estos animales». El concejal ha admitido que durante la pasada legislatura se llevaron a cabo «algunas mejoras» en estas instalaciones. Sin embargo, considera que «no se hizo gran cosa» en aquellos momentos y que ahora hay que intervenir para que el centro no se deteriore aún más. Jiménez ha explicado que, por ejemplo, las ratas se han hecho con la zona de cipreses y que han tenido que avisar a la empresa contratada por el Ayuntamiento para el control y la eliminación de las plagas en el municipio. «Después de este trabajo, se procederá a poner baldosas en el suelo para evitar que las ratas vuelvan a hacer galerías», ha señalado el responsable de Protección Animal en el Consistorio. Además, se pintarán todas las instalaciones y se colocarán puertas con vidrio para que «entre la luz en invierno». «Lo adecentaremos todo», ha señalado Manu Jiménez, «y habrá que estar muy encima a partir de ahora para que esta situación no se vuelva a producir».
«Ley muy restrictiva»
El concejal, por otro lado, tiene previsto convocar en los próximos días a todas las entidades animalistas de Vila porque «esto no puede salir adelante sin ellas». Además, el Ayuntamiento tendrá que adaptarse a partir de finales de este mes a todo lo contemplado por la recientemente aprobada Ley de Bienestar Animal. «Es una ley muy restrictiva y muy animalista», ha recordado el concejal, «establece obligaciones para las administraciones y los usuarios y obliga a implicarse más. Por ejemplo, tendremos que estar muy pendientes de las colonias felinas porque todos los gatos tendrán que llevar microchip. Y, quienes quieran tener un perro, tendrán que recibir un curso que aún no sabemos si lo tendrá que impartir el Ayuntamiento. En cuanto entre en vigor, tendremos que ponernos a trabajar y lo haremos en coordinación con el resto de municipios de la isla». Todo esto en una ciudad en la que hay censados 14.105 perros y 2.369 gatos. «Tenemos», ha señalado Manu Jiménez sobre estas cifras, «una población animal muy elevada».
En cuanto a la situación actual del centro de protección animal, Jiménez ha señalado que «ahora mismo está al completo». Y ha añadido que «es una pena porque entran muchos animales y salen muy pocos». En el caso de los perros, uno de los factores que dificulta la adopción de estas mascotas es que «el 80% de los que están en el centro están considerados como razas potencialmente peligrosas» y esto hace que los posibles adoptantes los rechacen. «Para tener a uno de estos perros», ha recordado Jiménez, «es necesario tener una licencia y a la gente le cuesta mucho tener que hacer los trámites». El edil, sin embargo, tiene claro que se trata de perros que, bien educados y tratados, «no dan problemas». Por ello, la concejalía trabaja ya en la puesta en marcha de una campaña de fomento de adopción de estos animales. «Aunque mucha gente piense lo contrario», ha concluido, «con estos perros no tienes un asesino en casa. Son perros a los que hay que educar y que no dan problemas. Es más, yo tengo uno».