El verano se ha extendido más de la cuenta en Ibiza y Formentera y estas cálidas temperaturas no durarán para siempre.
Si bien es pronto todavía, todo parece indicar que habrá que poner atención al tiempo a partir del próximo domingo. Aunque todavía con margen de incertidumbre, según avanza la Aemet, se espera que durante este periodo la Península se vea bajo la influencia de bajas presiones atlánticas que dejarán un predominio de los cielos nubosos o cubiertos y precipitaciones. Éstas serán más abundantes en el noroeste peninsular, en especial en el oeste de Galicia, e irán extendiéndose de noroeste a sureste, siendo poco probable que alcancen el extremo sureste peninsular. De cara al lunes 16 se espera que tiendan a menos en la mayor parte de la Península a la vez que acaben afectando a Baleares, incluso, y aunque con baja probabilidad, hay escenarios que apuntan la posibilidad de que llegasen a ser intensas en las islas así como en zonas de litoral del nordeste peninsular.
Por otro lado, se espera que las temperaturas desciendan de manera acusada, en Ibiza y Formentera a partir del domingo, según avanza eltiempo.es, alcanzando máximas de 21º a lo largo de la semana acompañadas de precipitaciones.
Predominarán los vientos de componente oeste, más intensos en el cuadrante noroeste peninsular, pudiendo llegar a intervalos fuertes y rachas muy fuertes en litorales y áreas de montaña, y tendiendo a arreciar el cierzo y la tramontana, también con posibilidad de algunos intervalos fuertes y rachas muy fuertes.
Aunque con una elevada incertidumbre el escenario más probable apunta a que el martes de la semana próxima las altas presiones ganen peso en la Península y Baleares con una tendencia a la estabilización. Si bien, no es posible descartar otros escenarios que muestran una situación de mayor inestabilidad, pudiendo acabar precipitando en cualquier punto, de manera más probable en Baleares y Galicia.