Durante la ejecución de las obras de remodelación de la avenida de Isidor Macabich los operarios hallaron, en noviembre del año pasado, los restos de un mausoleo de la época romana a la altura del Parque de la Paz. Un importante hallazgo arqueológico que, tras ser documentado, fue trasladado a principios de este año al costado del mismo parque. Los entonces responsables municipales tomaron la decisión de que aquella sería la ubicación definitiva del mausoleo, a unos 15 metros de donde había sido levantado originalmente.
El Consistorio ha sacado este miércoles a adjudicación la construcción del cerramiento y de la cubierta con el que se protegerá esta estructura funeraria que fue levantada entre finales del siglo I y principios del II después de Cristo, según explicó tras su hallazgo la arqueóloga municipal, Rosa Gurrea. La edificación, de estilo turriforme, pudo pertenecer a la adinerada familia Cornelius, que también habría sido la poseedora de los terrenos en los que se encuentran otros yacimientos cercanos como el de cas Clot o el de sa Bodega. Gurrea explicó el pasado mes de enero que una lápida hallada en el siglo XVI y de la que solo existe constancia documental es la que dio la pista para señalar que el mausoleo había sido propiedad de los Cornelius. En esta lápida figurarían los nombres de algunos de los integrantes de la familia Cornelius y, más en concreto, el de Marcus Cornelius Avitus, padre e hijo. Sería el hijo el que habría encargado este mausoleo para su padre.
El edificio, según la explicación de los expertos, es la estructura con la que en aquella época las familias adineradas protegían los lugares de cremación de sus muertos. En el interior, hay una pequeña cripta de una cremación en la que originariamente debieron depositarse las urnas con las cenizas, otros restos y ofrendas. Este mausoleo debió ser vandalizado entre los siglos VI y VII, por lo que no se han encontrado grandes restos funerarios, salvo algunas esquirlas que el Ayuntamiento pensaba analizar en el momento del hallazgo.
Ahora, el Consistorio trabaja para la protección de esta edificación, que tendrá una cubierta metálica y una valla. Además, contará con su propio sistema de iluminación. Los trabajos deberán llevarse a cabo en un plazo de dos meses tras la adjudicación, cuyo coste total, con IVA, será de 82.241 euros.