El concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Ibiza, Jordi Grivé, ha comunicado ya al Seprona de la Guardia Civil «movimientos sospechosos» en la bahía de Talamanca. Una información que Grivé ha proporcionado al instituto armado tras ser alertado el Consistorio de la presencia de embarcaciones del controvertido pirata de Porroig, Evaristo Soler, en esta zona. «Hemos tenido ya primeros contactos con el Seprona por estos movimientos», ha señalado Grivé, «pero hay que cogerlo con las manos en la masa por lo que haremos un plan de vigilancia porque es lo único que podemos hacer».
Grivé se ha pronunciado de este modo tras conocerse qu Soler habría trasladado a Talamanca al menos tres de las embarcaciones con las que operaba ilegalmente en la zona de Porroig, en un negocio por el que tiene abiertas varias causas judiciales. Ante esta situación, el Ayuntamiento de Ibiza ha querido adelantarse a los problemas al conocer que «alguien está poniendo muertos ilegales». Celadores del Consistorio también digital la zona y se ha animado a vecinos de Talamanca a informar de cualquier movimiento que puedan detectar.
«No podemos permitir lo que vemos cada verano», ha señalado Grivé, quien ha recordado que en los meses de temporada alta llegan a fondear de forma ilegal en Talamanca más de 170 embarcaciones. Por este motivo, ha alarmado aún más la presencia de barcos de Soler en la bahía pues muchos temen que pretenda trasladar a este espacio su negocio, con los problemas que ello conllevaría. De cualquier manera, y al margen de lo que haga finalmente Soler, el Ayuntamiento ya está tramitando la documentación necesaria para poder presentar un nuevo plan de fondeos para Talamanca. Plan que se ha tenido que empezar «desde cero» tras rechazar las administraciones correspondientes el ya presentado en su momento y que, según ha recordado Jordi Grivé, se tardó años en preparar. El nuevo plan, ha añadido, tendrá que ser competencia de Ports de Balears y su objetivo fundamental será el de proteger las praderas de posidonia de Talamanca.
Grivé ha explicado que, mientras tanto, el Consistorio prepara ya el proyecto de alejar «el máximo posible» el balizamiento de protección de la playa. Una acción con la que se podría acabar con parte de los fondeos ilegales, según ha señalado el edil. «Se evitará una parte de estos fondeos mientras se tramita la regulación», ha añadido, «porque no podemos permitir lo que tenemos aquí cada verano».