Desde hace algunos días, el Hotel Bergantín de Sant Antoni acoge ya a decenas de turistas del Imserso, los primeros de este año en inaugurar una actividad que en las próximas semanas se extenderá también a establecimientos hoteleros de otras zonas de Ibiza. Así, el Hotel Ereso o el Invisa Cala Verde recibirán a estos visitantes a partir del 14 de febrero y paulatinamente otros hoteles de Ibiza (entre cinco y seis en total) participarán en esta iniciativa.
Desde la Pequeña y Mediana Empresa de Ibiza y Formentera (PIMEEF), el presidente Alfonso Rojo consideró ayer que este tipo de turismo contribuye «mucho» a mantener una serie de negocios en activo y «lo hemos notado cuando no hemos tenido a estos turistas del Imserso», aseguró.
«Potenciar el Imserso»
«Son las clásicas cosas a las que nos das importancia porque no es un volumen demasiado alto de visitantes, pero cuando no se tienen sí se echan en falta. En este caso, deberíamos intentar potenciar entre todos el turismo del Imserso para que fuera mucho más. Es bienvenido porque ayuda a los negocios que se mantienen abiertos todo el año, que son muchos», concluyó Rojo.
Desde la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera, el gerente Manuel Sendino señaló que para determinados establecimientos turísticos y numerosos trabajadores es un mercado «bueno» al dinamizar la actividad en pleno invierno.
El presidente de Fomento de Turismo, Alejandro Sancho, recordó que en la isla no existe ninguna otra operativa que comience tan pronto, por lo que, sin duda, es un claro elemento desestacionalizador. «En este sentido es muy positivo, aunque seguimos viendo que el Gobierno no ha atendido en los últimos años la realidad de los costes que se registran en el sector turístico, mucho más acusados en las zonas insulares», comentó.
Según advirtió el presidente: o se actualizan los precios del turismo del Imserso o al final se correrá el riesgo de que desaparezca. «Sería algo muy triste y se debe hacer fuerza en ello, abordándolo desde las patronales y las administraciones para hacer entender que es un mercado positivo, que genera actividad durante los meses de temporada baja y que siempre es bueno alargar la temporada tanto al principio como al final», manifestó Sancho.
Desde Fomento de Turismo lamentaron que el escaso factor de rentabilidad que genera este turismo no interesa a numerosas empresas que acaban rechazando en Ibiza trabajar con estos clientes. «Al final, está claro que si la rentabilidad es nula, o incluso negativa, es muy difícil. Cada vez hay menos hoteles interesados», insistió.
El apunte
Pérdidas de los hoteleros
Sonia RibasEl pasado mes de octubre, hoteleros de Ibiza aseguraban a este rotativo que no podían trabajar con el Imserso cobrando por cada turista una pensión completa de 26 euros al día. Ante la preocupante situación, administraciones municipales como el Ayuntamiento de Santa Eulària impulsaron una propuesta para reclamar al Gobierno central que garantice la continuidad del programa de turismo social para mayores que permite, en su caso, adelantar la temporada en hoteles de Santa Eulària y Es Canar.
Desde el Consistorio afirmaron que el programa beneficia a empresas de la oferta complementaria, consiguiendo un efecto positivo en la economía de estas zonas y, especialmente, en los trabajadores que ven alargados sus periodos anuales de trabajo, tanto de forma directa como indirecta. En la temporada 2022-2023, el Imserso aportó en Santa Eulària un total de 129.211 pernoctaciones repartidas en seis hoteles. En este sentido, en el municipio se pudo mantener este programa gracias a la aportación económica del Ayuntamiento, que destinó 390.000 euros procedentes de recursos propios, a razón de 2 euros por pernoctación y turista para compensar la rentabilidad de los hoteles.
También el Ayuntamiento de Sant Antoni y el Consell acordaron aportar dos euros por persona y pernoctación para compensar las escasas ganancias de los establecimientos hoteleros participantes.
El presidente del Consell d´LEivissa, Vicent Marí, valoró también la importancia de mantener el programa turístico por la actividad económica que supone para la isla y que puede rondar los 14 millones de euros repartidos principalmente entre pequeñas empresas de transporte, comercio y hostelería. «Es un programa que genera una microeconomía importante que hay que poner en valor», consideró.