Las reservas hídricas de Baleares han aumentado del 53% al 54% en el mes de enero, lo que permite que la situación global de éstas haya mejorado en comparación con el mismo mes del pasado año 2023, a pesar de las escasas lluvias de los últimos meses.
Si bien el cómputo general de todas las Islas es algo más positivo que hace meses, la realidad por islas es bien diferente. En este sentido, Mallorca registró un incremento en sus reservas hídricas del 54% al 56%, mientras que Menorca experimentó una reducción del 54% al 52%, e Ibiza sufrió una caída más pronunciada del 43% al 39%.
En el detalle por unidades de demanda, se observa un panorama mixto. Pues, Artà, Migjorn, Pla, Menorca, e Ibiza han experimentado descensos en sus reservas, lo que contrasta con los aumentos en Manacor-Felanitx, Palma-Alcúdia, Tramuntana Nord y Sud, y Formentera.
En términos de alerta por sequía, el 91,9% del territorio está en prealerta, mientras que sólo Tramuntana Nord, que constituye el 8,1%, mantiene una situación de normalidad.
Las nueve Unidades de Demanda (UD) --Menorca, Artà, Manacor-Felanitx, Migjorn, Es Pla, Palma-Alcudia, Tramuntana Nord, Tramuntana Sud, e Ibiza-- se mantienen en prealerta, y solo Formentera está en alerta, indicando un nivel más crítico en sus reservas de agua.
En enero, Baleares han experimentado un mes con más lluvias de lo habitual, registrando 66,8 litros por metro cuadrado y superando así la media histórica de 54,6.
En detalle, las islas de Mallorca y Menorca gozaron de condiciones más húmedas, con precipitaciones de 76,1 y 68 litros por metro cuadrado, respectivamente. En contraste, Ibiza y Formentera tuvieron menos lluvia de lo habitual, con 12,5 y 18,6 litros por metro cuadrado, quedando por debajo de sus medias históricas.
Este mes también se caracterizó por temperaturas más altas de lo esperado, con una media de 12,2 grados centígrados, lo que supone una anomalía de 1,7 grados por encima respecto a la norma.