La ciudad de Ibiza ya cuenta con una papelera especialmente diseñada para depositar chicles. Esta nueva iniciativa tiene como objetivo hacer frente a una problemática que sufre el municipio desde hace un tiempo.
Pese a que actualmente el municipio de Vila cuenta con únicamente una papelera de este tipo instalada en la Avenida Ignasi Wallis, la intención por parte del Ayuntamiento es incorporar, al menos, una decena más en laspróximas semanas. «De momento hicimos la prueba instalando únicamente una papelera pero la acogida ha sido tan buena que llegarán 10 nuevas papeleras más», aseguró Jordi Grivé, concejal de Medioambiente y Limpieza, que añadió que si la medida funciona se seguirán «expandiendo» estas papeleras.
Asimismo, el concejal de Vila afirmó que esta nueva iniciativa no supone un coste excesivamente caro para el Ayuntamiento del municipio, siendo únicamente de 100 euros por papelera. «A veces, las pequeñas acciones bien hechas calan en los ciudadanos y conseguimos cambiar aquellas cosas que no se hacen bien», puntualizó Grivé.
Cabe recordar que el chicle es un material que tarda más de cinco años en degradarse del suelo y que provoca manchas en la vía pública dejando en mal estado los acerados y el pavimento de las carreteras.
Además de suponer un impacto visual en la ciudad, también conlleva un coste económico. En este sentido, Grivé aseguró que la retirada de cada chicle supone un euro para el Ayuntamiento de Eivissa, si se tiene en cuenta las horas del personal de limpieza, el agua caliente a presión necesaria para hacerlo y el combustible que utiliza la máquina encargada de ello. «Si tenemos 600.000 chicles pegados en la ciudad de Ibiza, son 600.000 euros que podríamos evitar con el simple gesto de tirar el chicle donde toca, bien en papeleras convencionales o en aquellas diseñadas para ello», explicó el concejal de Limpieza.
Grivé recordó que sanciones para este tipo de infracción en el municipio de Vila oscilan entre los 600 y 2.000 euros.