La inspección ocular realizada ayer por la Unidad de la Policía Judicial de la Guardia Civil determinó que el incendio declarado el pasado domingo en los apartamentos Don Pepe se produjo por un cortocircuito, según explicó el Instituto Armado, tras observar los horizontes de humo que sirvieron para encontrar el «foco de origen del incendio».
Un fallo eléctrico, dentro de la vivienda calcinada, que ya adelantó a Periódico de Ibiza y Formentera el Jefe de Bomberos de Ibiza, Miguel Sevilla, quien explicó que esta sobrecarga, junto a la «antigüedad» del sistema de suministro energético del inmueble, provocó este cortocircuito en un aparato conectado a una de las tres regletas con varios enchufes que había en la casa. Agregó que todas ellas estaban conectadas al mismo circuito eléctrico.
«Este fallo provocó una chispa en un aparato de la casa y saltó al mobiliario de la vivienda, lo que provocó la rápida propagación del fuego por el interior del inmueble», lamentó este profesional, resaltando que, al vivir en la casa tres núcleos independientes, cada uno de ellos disponía de una regleta en su habitación y que, por eso, estaban conectadas todas las tomas de conexión de los tres alargadores enchufados en la casa. Cabe recordar que en el inmueble calcinado vivían el propietario, un hombre de más de 40 años, y dos parejas con sus mascotas. También señalaron desde el Cuerpo de Bomberos que estos incendios son muy «aparatosos» porque generan mucho humo, se queman cables, el humo invade la escalera y entorpece la evacuación.
Sin ir más lejos, tres vecinos de las plantas superiores y un perro tuvieron que ser evacuados con una autoescalera porque el fuego, que tenia una gran carga térmica, comenzó a ser más «virulento». Las llamas incluso salieron por las dos fachadas del edificio, lo que obligó a crear dos equipos de extinción, según relataron los bomberos.
Hay que señalar que todo el edificio, y no sólo la escalera 7, fue desalojado por precaución, pero todos los vecinos, excepto los de las viviendas afectadas, pudieron regresar a sus casas cuando los bomberos refrescaron y ventilaron la zona. No obstante, los damnificados y los inquilinos de las viviendas contiguas a la casa calcinada se realojaron temporalmente en los Apartamentos Bon Sol de Platja d'en Bossa a través de los servicios sociales del Ayuntamiento de Sant Josep. No obstante, según la inquilina del piso afectado, sólo podrán estar en este apartamento hasta el próximo domingo. Tras lo ocurrido el domingo, destacó conmocionada que se ha quedado sin nada y lamentó, además, que sigue sufriendo «ansiedad» por lo sucedido. Además, destacó que los servicios sociales únicamente les ha ofrecido ayudarles con el coste de entrada para poder alquilar una habitación en Ibiza, «pero tenemos que encontrar algo nosotros». «Mi pareja y yo llevábamos dos meses buscando casa por todas partes; en las inmobiliarias, en las redes sociales... y sólo pudimos encontrar esta habitación y lo hicimos en el último momento antes de tener que abandonar el anterior domicilio», lamentó esta mujer, todavía muy consternada.