Vecinos de la avenida 8 d'Agost de Vila se quejan de la presencia de «cada vez más caravanas» en la zona.
Martín es uno de estos vecinos de la zona desde hace tres años y, tal como explica, «hace tres semanas que hay un par de caravanas instaladas en el parking del centro de salud de Vila». El vecino se queja de que «ocupan plazas de parking, además de con las caravanas, con las motos que tienen al lado aparcadas para poder moverse por la isla, que los vecinos y los usuarios del centro de salud no pueden usar».
Basura
Sin embargo, lo que más molesta a Martín «y a todos mis vecinos en general», es que «dejan las bolsas de basura acumuladas en el parking y echan las aguas grises al suelo esperando que se evaporen, además del olor a marihuana y las juergas por las noches».
«Es como si fuera el ‘backstage' de la milla de oro de Ibiza, con sus ratas y sus terrenos descuidados», señala el vecino de la avenida 8 d'agost que además, compara también una parcela a 100 metros del centro de salud con «el sur de Texas: hay decenas de autocaravanas allí acampadas».
Martín asegura haber hecho «multitud de denuncias en la línea verde del Ayuntamiento y de llamadas a la Policía Local, pero no nos han hecho ningún caso».
La parcela a la que este vecino compara con el sur de Texas presenta, efectivamente, un buen número de autocaravanas.
Este lunes, Periódico de Ibiza y Formentera pudo contabilizar hasta dos decenas de autocaravanas y furgonetas camperizadas en este solar que hace la función de aparcamiento.
Trabajadores
Entre los habitantes de estas autocaravanas se encuentra Rafael, que trabaja como cocinero en uno de los establecimientos más emblemáticos de la isla.
«Llevo cinco años trabajando en Ibiza con mi mujer, como la cosa está como está con los alquileres, optamos por venir en la autocaravana», explica Rafael que, tal como asegura él mismo «ya no son los 1.500 euros o más que te piden de alquiler, son los tres meses de fianza que te exigen, más el mes de agencia, más el mes en curso... Total, que hay que venir con unos 7.000 euros en el bolsillo para poder vivir en Ibiza. Ibiza te cruje».
Rafael es andaluz y reconoce que «en Ibiza el único problema que hay es el de la vivienda, porque trabajo hay todo el que quieras y más, al contrario de lo que pasa en Andalucía, que no hay problema con la vivienda pero el trabajo escasea y es de lo más precario».
Rafael reconoce que «gano un buen sueldo», con el que se puede permitir «una autocaravana digna», mientras explica que «mucha gente que trabaja y gana buenos sueldos ha decidido comprarse una buena autocaravana antes que un piso». «Muchas de las autocaravanas que hay aquí acampadas son de alto standing y son nuevas», observa el cocinero andaluz apuntando a algunas de sus autocaravanas vecinas.
En su caso, Rafael asegura que «voy moviendo la autocaravana cada par de semanas y no suelo tener problemas hasta que voy a Santa Eulària, donde te echan a la mínima». Para reponer los depósitos de agua y deshacerse de las aguas grises, Rafael explica, «voy siempre a Sant Rafel, allí se pueden hacer las dos cosas».
Turistas
Además de trabajadores, esta zona alberga también autocaravanas de personas que llegan a Ibiza de vacaciones desde el País Vasco. Este es el caso de Iker y su familia.
«Llegamos hace cinco días y ya hemos sabido que en Ibiza el tema de las autocaravanas está bastante complicado», explica el turista vasco.
Este formato de viaje en caravana es el habitual en la familia de Iker, que explica que usa una aplicación «para conocer las ubicaciones más adecuadas en los distintos lugares a los que vamos». Respecto a esta aplicación, Iker asegura que «en todas las ubicaciones del municipio de Sant Josep la Policía ha puesto un comentario respecto a la prohibición de acampar en autocaravana y de las multas a las que te expones». «Sin embargo, hemos pasado algunas noches por esas zonas y hemos conocido a gente que está viviendo allí en sus autocaravanas». «En otros lugares, como en Francia, hay zonas más que adaptadas para autocaravanas, con sus zonas verdes, baños y lugares en los que verteré las aguas grises», explica Iker.
Goldie es vecina de este solar y, mientras pasea su perro explica que «las autocaravanas que hay aquí aparcadas no dan ningún problema y el terreno está totalmente limpio». «El único sentimiento que tengo hacia la gente de las autocaravanas es tristeza porque no puedan pagarse una vivienda», sentencia.