El Teatro España de Santa Eulària acoge este jueves, de 09.30 a 12.30 horas, una jornada organizada por Solsulet para tratar las estrategias y los proyectos empresariales innovadores para la descarbonización. El responsable de la empresa ibicenca, Joan Tur (Ibiza, 1986), asegura que la transición energética es el único camino posible, por lo que insta a instituciones y particulares a ir adoptando medidas para completar este importante cambio.
-¿De dónde surge la iniciativa que llevarán a cabo este jueves?
-Surge del clúster de transición ecológica que desde hace un año está en activo. La iniciativa se crea además porque dentro de este clúster balear la única empresa no mallorquina somos nosotros y teníamos la intención de organizar este evento para dar a conocer la existencia del proyecto, que se sepa cómo funciona el clúster puesto que realizamos mucho trabajo para conseguir esta ansiada descarbonización y pretendemos descubrir a otras empresas innovadoras o dedicadas al sector la posibilidad de sumarse a esta asociación. La jornada tratará sobre los proyectos y estrategias que se desarrollan en clave empresarial y también desde el sector público para impulsar iniciativas que puedan cumplir los objetivos de la Agenda 2030.
-La jornada va a contar con dos mesas redondas.
-Destacaría a todos los participantes. Una mesa estará dedicada al tema energético donde participarán representantes de Redeia, Endesa o del Instituto Balear de la Energía. En la otra mesa redonda se hablará del agua, la circularidad y la regeneración y se abordarán desde proyectos relacionados con los residuos turísticos al hidrógeno, además de alguna sorpresa que no se puede desvelar sobre proyectos que se ejecutarán en Ibiza muy interesantes. El gran trabajo ha sido realizar la selección de los ponentes relacionados con grandes proyectos vinculados a Ibiza y Formentera.
-¿En qué consiste la descarbonización y cómo se encuentra el proceso de este gran cambio en Ibiza?
-Al final se trata de realizar una actividad ya sea empresarial o pública que no comporte la emisión de dióxido de carbono. Por ejemplo, conducir un vehículo a gasolina sí comporta esa emisión, pero no uno eléctrico cargado con energía solar. Esta descarbonización va lenta en las Pitiusas porque no hay demasiada industrialización y precisamente la intención de las jornadas es desmentir que no se está haciendo nada al respecto, aunque avanzamos con lentitud puesto que en Mallorca se está haciendo mucha cosa, pero aquí los problemas que tenemos están muy relacionados con el turismo y debemos incidir más en la descarbonización.
-Existen ayudas, pero la falta de información o la excesiva burocracia pueden ser un problema.
-Hay muchas ayudas, incluso un Banco Verde en Europa que está a punto de cerrarse porque nadie lo utiliza. Creo que se ve como algo muy lejano, muy difícil de acceder, pero una de las cosas que ofrecemos desde el clúster es que a veces hay dinero disponible para la Administración para temas de transición, pero un ayuntamiento, por ejemplo, entre temas de residuos, el día a día o el urbanismo, no puede asumir todo y no tiene tiempo de pensar en una estrategia de este tipo. A veces, los proyectos no existen o no cuentan con esta previsión, pero nosotros podemos ayudar a conseguir este dinero. Va un poco enfocado a ayudarnos a caminar más rápido y avanzar y no a dejar los problemas sobre la mesa de los políticos y olvidarse. Es un error pensar que una persona sola lo puede gestionar. Debe hacerse entre todos este trabajo y la jornada será un espacio de debate en este sentido. Sobre la burocracia, un cliente lo único que necesita es ayuda y ahora existen oficinas para la transición energética y también hay empresas que pueden gestionar las ayudas. Al final, se trata de conocer estas posibilidades, de tener información y de ayudarnos entre todos.
-En su empresa creen que contar con energía solar no solamente supondrá un ahorro económico, sino también un gran paso hacia la sostenibilidad.
-Es posible que pensemos en el ahorro, pero al final todo tiene un sentido. Ya nos debemos olvidar del petróleo y hay muchos cambios a los que enfrentarse, decisiones que todavía no se han abordado, pero el único camino es no depender de los combustibles fósiles y que se sea eficiente al máximo. Así y todo, siempre va subiendo el consumo y no lo reducimos. Necesitamos una estrategia conjunta y trabajar para lograr esta transición.
-En un lugar turístico como Ibiza, ¿cómo se puede afrontar el cambio?
-En la jornada hablaré del proyecto 'Clean Island'. En 2018, se realizaron en Suecia unas jornadas en el que participaron 26 islas con problemáticas comunes, aunque con diferentes casuísticas. Al final, es una descentralización del consumo y la centralización en un momento concreto como la época estival. Se trabajó después durante unos años con profesionales de todo tipo y se adoptaron decisiones. Hay, por tanto, un trabajo hecho, pero no se ha continuado. Se quedaron allí las conclusiones, han pasado dos años y no se ha vuelto a hablar del tema. El programa sobre cómo conseguir islas 'limpias', sin embargo, lo están aplicando empresas privadas y nosotros trabajamos en él, independientemente de los beneficios que nos pueda suponer.